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ALEXANDER CAMBERO: Cierren la cárcel y los medios también



La hermana Mª Eugenia Noreña, dir. del colegio Sta. Ana, cuyas actividades estuvieron suspendidas tres semanas, mostró los restos de 8 bombas lacrimógenas que cayeron en el plantel, además de un proyectil.

“Este régimen quiere destruirnos….”

 

Su verdadero anhelo es tener a Venezuela en un puño, con medios de comunicación pulverizados y perseguidos por decir la verdad, o convertidos en esa cofradía de adulantes que ejercen la labor oscurantista en los espacios que regenta el Estado opresor.

La estrategia es mostrar calma mientras la nación se cae a pedazos, tenemos meses observando el show de las cárceles. Un escalofriante mundo de corruptelas que se han profundizado con este gobierno revolucionario que tiene como ejército de las sombras al malandraje.

Es tal la desfachatez que prefieren perseguir a los medios de comunicación independientes que aquellos que delinquen. Quisieron ocultar los graves sucesos en la cárcel de La Planta, manipulando hasta que la dura realidad los rebasó. Caracas convertida en un sorprendente torbellino bajo el paisaje de los detonantes y el gas lacrimógeno. Toda una odisea fue lograr evacuar a los niños de los colegios cercanos, los comercios cerrados y un mar de incertidumbres mientras el Gobierno maquinaba a quien culpar.

Es la primera vez que el imperio norteamericano se escapa de las reiteradas imputaciones. Igualmente Henrique Capriles salió absuelto de toda culpa. Una minicadena para mostrar el traslado de los presos hacia otros reclusorios tan hacinados como este. Una especie de correr la arruga para no resolver absolutamente nada, trasferir el caos a diferentes reclusorios pero lejos de Caracas para evitar que el desconcierto los terminara de salpicar. En el fondo trasladaron un problema que se multiplicará en otros lados, pero no en la capital donde se encuentran las representaciones de los gobiernos extranjeros.

La gran mascarada informativa oficial quedó al descubierto, haciéndole un terrible daño a sus intereses. En primer lugar le mostraron al mundo que efectivamente no era un invento de los medios independientes, allí de verdad se desarrollaba una verdadera batalla campal, una increíble refriega en pleno corazón de una ciudad que vivió verdaderos momentos de pánico. Mientras lo ocultaban como un secreto en donde se les escapaba la vida. Pero lo más extraordinario de esos minutos de exposición mediática fue indicarles a todos la ausencia total del presidente Hugo Chávez. En esta crisis ni siquiera vía Twitter se leyó una opinión del primer mandatario nacional, lo que abre dos interrogantes: ¿o anda muy mal con su penosa enfermedad, o se oculta vergonzosamente como nos tiene acostumbrados, en los momentos en donde hay que mostrar coraje? No sabemos si efectivamente fue algo intencional. No es de extrañar que esto sea así, ya que la lucha por la heredad presidencial es a cuchillo limpio. Después de trece años sus viudas socialistas se enteraron que aquel que eclipsaba desde las tribunas, ahora forma parte del largo silencio. Un viejo comunista que invirtió su juventud en exponer su pellejo bajo el tronar de las bombas, el ahora presidente de la República Oriental del Uruguay, José Mujica, lo dijo con la inteligencia de los formados hombres del Sur. Luego de hablar acerca de los inconvenientes que les trae a los procesos revolucionarios del continente el cáncer presidencial, dijo que de todas formas la vida continuará. Es decir que si Chávez sale del escenario no se acabará el mundo. Por supuesto esta parte de la entrevista, que sí fue al aire en el noticiero estelar del canal uruguayo Teledoce-, no se vio en los espacios manipulados del régimen. El sueño del régimen es destruir la libertad de expresión. Acabar con los medios de comunicación para hacerlos instrumentos dóciles de este gobierno absolutamente terrorífico. Gracias a Dios los venezolanos no quieren seguir esta agonía, estamos cerca de liquidar democráticamente esta pesadilla.


Por: ALEXANDER CAMBERO
alexandercambero@hotmail.com
twitter @alecambero
EL UNIVERSAL
miércoles 23 de mayo de 2012