Chávez es contrario al Rey Midas, todo
lo que toca, lo convierte a otro color
Así ha sido desde que asumió el poder en 1999 ganando elecciones tras elecciones, y quien sabe si también triunfará el 7 de octubre, sacrificando los derechos humanos de los venezolanos.
El “mandarin” o mandatario venezolano ya no es el mismo hombre que luchaba contra el cáncer hace 10 meses cuando lo anunció y aseguró que lo había derrotado. Nada de eso. Ahora se le ve debilitado, haciendo de tripas el corazón ante las cámaras para no mostrar al público lo mal que lo está pasando.
Ha tenido que hacer un gran esfuerzo para sostenerse de pie durante 30 minutos de alocución o cadena de radio y televisión, apoyándose en el pódium y no sentado en su silla o despacho de Miraflores como acostumbraba hacerlo hasta ahora.
Lo trajeron en silla de ruedas, dice el periodista Nelson Bocaranda, al salón de los espejos y ajustaron el escenario para no mostrar que estaba ayudado por una silla de ruedas. En las cámaras se ve que Chávez firmó la reforma a la Ley del Trabajo de pie y no sentado. Y lo más curioso es que en lugar de “a” escribió “p” al lado de su firma.
También hablan de una sombra que se atravesó mientras hablaba en cadena en el salón de los espejos de Miraflores. En las redes sociales se refieren a la “pelona” que es como llaman los venezolanos a esa señora llamada la muerte.
Pero lo que no se esperaban los venezolanos es con su orden de salir de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), que implica renunciar a la Organización de los Estados Americanos, no importa los tratados que se hayan suscrito.
Las reacciones no se han hecho esperar. Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), resume lo que otras ONG califican como un golpe contra la Constitución venezolana.
“Coloca a los venezolanos ante una situación de indefensión por la falta de independencia de los Poderes en el país. Éste es un gobierno que ha roto la línea entre el Estado y el Gobierno, simplemente ya no hay Estado. Las instituciones están viciadas y responden a los deseos del Gobierno central, el cual se ha convertido en el todo poderoso, esto ha traído la terrible consecuencia de que al pueblo simplemente no se le respeten sus Derechos Humanos y tengan que acudir a instancias internacionales para realizar sus denuncias”.
Señaló que el retiro de Venezuela de la Corte Interamericana puede ser la excusa perfecta para que el Gobierno central atente en contra del ejercicio de los derechos de los ciudadanos. “Un retiro representaría un mayor aislamiento del país frente a la Comunidad Internacional del que ya venimos presentando, ante las reiteradas violaciones de los convenios, tratados, y obligaciones internacionales, basadas en un concepto anacrónico de la soberanía nacional. Además, de concretarse el abandono a la Corte Interamericana, los venezolanos no tendrían a qué ente internacional acudir”.
Aveledo aseguró que detrás del posible retiro del Sistema Interamericano tiene como trasfondo evitar que la Comisión pueda presentar demandas contra Venezuela ante la CIDH. “Pareciera que lo que el Gobierno pudiera pretender es que la Comisión no pueda presentar demandas contra Venezuela ante la CIDH. En el contexto actual y vistos los informes emitidos por la Comisión Interamericana en los último años, también podría ser interpretada como una confirmación de las denuncias de vulneración de la Carta Democrática Interamericana que algunos sectores han formulado en los últimos años contra el gobierno venezolano.
Aseguró que el anuncio del retiro a la CIDH colocaría a Venezuela en una posición similar a la de gobiernos autoritarios. “Desde el punto de vista filosófico-político, es objetable un anuncio que colocaría a Venezuela en una posición similar a la de gobiernos autoritarios como el de Fujimori en Perú, que no llegó a denunciar la Convención Americana pero pretendió desconocer la competencia de la Corte Interamericana para resolver demandas presentadas por la Comisión Interamericana además, Venezuela estaría dando un duro golpe al sistema interamericano de derechos humanos, que es referencia mundial en la lucha contra las dictaduras de todo signo ideológico y contra las graves violaciones a derechos humanos que han perpetrado”.
Hugo Chávez es todo lo contrario al Rey Midas, todo lo que toca, en lugar de oro, se convierte en otro color.
Por: Ludmila Vinogradoff
corresponsal en caracas
Politica | Opinión
SALUD PRESIDENCIAL
DDHH | CIDH
Domingo 06 de mayo, 2012