El dirigente afirmó que saldrán los
extranjeros que están en la FAN
■ El responsable de liderar la política exterior del abanderado de la MUD, Henrique Capriles, afirmó que un hipotético gobierno de la oposición mantendrá buenas relaciones con países como China.
■ Ramón Guillermo Aveledo, aseguró que: “Nadie tienen que temer de un Gobierno de oposición, solo los delincuentes y corruptos pero los ciudadanos normales pertenecientes a una misión mejorarán”.
“El interés de los venezolanos guiará nuestra acción”, fue la frase que más repitió Ramón Guillermo Aveledo durante los más de 90 minutos de conversación sobre cómo sería la política exterior de un hipotético gobierno de Henrique Capriles.
El hombre encargado de mantener la unidad opositora ahora está dedicado a la definición de las líneas de maestras de las relaciones que ese posible nuevo Ejecutivo tendría con la comunidad internacional.
Afirmó que ella se planteará en función de tres dimensiones: ético-política; histórico-coyuntural, y estructura.
“Convergerán en la nacionalización de nuestra política exterior, que sea de todos, no de un partido y que atienda nuestros intereses”, precisó.
—Ustedes proponen que el país sea un abastecedor confiable de crudo. ¿Qué garantías ofrecen?
– La confiabilidad depende de no usar el crudo como un arma sino como un negocio.
El petróleo ha sido un seguro del Gobierno para hacer lo que le da la gana. La ideologización del negocio es algo distinto a ser confiable. Genera confianza el que cumple compromisos, leyes y acuerdos internacionales.
—Aseguran que mantendrán la cooperación petrolera ¿Qué pasará con el Acuerdo de Caracas?
– Hay que evaluarlo con franqueza, junto con los otros países. Son compromisos y no podemos tirarlos de manera irresponsable, pero hay que evaluarlos seriamente porque uno no puede dar más de su capacidad. Venezuela ha demostrado que no es un país egoísta, por eso no hay nada de qué temer.
—¿Se reevaluará Petrocaribe? ¿Cesará el mecanismo?
– Será reevaluado y se mantendrá en la medida de nuestras posibilidades y en relación con el objetivo principal del Gobierno, que es el progreso de los venezolanos.
—¿Acabarán con los beneficios y acuerdos de cooperación beneficiosos para otros países?
– Cualquier análisis que parte del supuesto de que cambiando un gobierno cambia todo al día siguiente no es verdad; hay cosas que cambian más rápido, otras más gradualmente y otros no. Actuaremos con responsabilidad.
—Proponen una “revisión cuidadosa de acuerdos”. ¿Saben cuántos se han firmado?¿Cuáles se revisarán?
– Estamos en el inventario.
Uno de los problemas es que este gobierno no es transparente. Muchos no pasan por la Asamblea Nacional. A los extranjeros uno les dice que son los más interesados en que haya transparencia, porque eso hará mucho más fácil las cosas. Está el caso de China, un país con excedentes financieros que busca dónde invertir y con necesidades de materia prima. Lo que antes era impensable, como exportar petróleo a China, hoy no lo es gracias a los altos precios. Uno no puede prejuzgar los negocios con quien los hace; tiene que haber un sentido práctico y atender el interés nacional.
—¿Cambiará la relación con China? ¿Qué pasará con los acuerdos firmados?
– Tenemos que evaluar todo con seriedad, pero digo que, en la conciencia de que China es y será un país importante, pensar que Venezuela cortará con él no es real. Pero hay que revisar bien los acuerdos y ponerlos a derecho.
—¿Qué implica ponerlos a derecho? —Que si son contratos internacionales tienen que ira a la AN; si son tratados entre Estados, tienen que ir a la AN. Eso da seguridad.
—¿Muchos de los acuerdos no han pasado por la AN?
– No se sabe, pero el Convenio Integral de Cooperación con Cuba no ha pasado.
—¿Eso lo hace susceptible de ser denunciado?
– Es muy probable que los otros países hayan tomado salvaguardas para resguardar sus beneficios. Por la seguridad de todos, esa transparencia es conveniente.
–¿Ha habido acercamiento con China u otros países para decirles qué harán?
– Cada día tiene su afán; hay oportunidad para todo. No hay que ser inoportuno.
—¿Mantendrán el Fondo Chino?
– Hay que evaluarlo. No tenemos la información adecuada y hay que tenerla para saber qué nos conviene.
—¿Qué pasará con la relación con Cuba?
– Hubo cooperación con Cuba antes de este gobierno, hay ahora y habrá cooperación en el futuro. Tenemos una visión distinta sobre la relación entre el Gobierno y el pueblo a la que tiene Cuba. Desearíamos cambios allá. Ahora, no pensamos que los pueblos deban pagar los errores de sus gobernantes. No hemos sido partidarios del embargo comercial; pensamos que es un recurso ineficiente, que ha puesto sobre los cubanos un peso injusto. Se dicen muchas cosas de la relación entre Cuba y Venezuela y hay que saber de qué se trata para saber qué continuará. Si podemos continuarlas y nos conviene, lo haremos; aquello que no nos convenga se suspenderá; eso supone una evaluación seria y real. Podemos entendernos con gobiernos que piensan distinto a nosotros si hay motivos de mutua conveniencia.
—¿Qué harán con los cerca de 60.000 cubanos que han venido por los acuerdos bilaterales?
– A las personas se les trata con respeto. Ahora, hay áreas relacionadas con la soberanía que no admiten la presencia de extranjeros, por más amigo que sea su gobierno. Ni en las FAN ni en las áreas de seguridad. ¿Admitiría un gobierno de otro país nuestra presencia en esas áreas?
–¿Cesarán de inmediato a los asesores cubanos que están en la FAN?
– Eso genera incomodidad entre los militares venezolanos, y es comprensible. En las áreas que son sensibles para la soberanía no deben estar, como tampoco debe haber presencia militar de otro país; no solo de Cuba.
–¿Cómo serían las relaciones con Irán?
– En materia de energía atómica, seremos leales a la política tradicional de Venezuela; no nos gusta que eso prolifere, y apoyaremos las resoluciones en la ONU. Con Irán hemos tenido cooperación; somos socios en la OPEP. Si el respeto y la evaluación de los intereses indica que las relaciones tienen que aumentar, se hará; si tienen reducirse, se hará, siempre alejado de prejuicios, todo sobre la base objetiva de un análisis de nuestros intereses. No endosaremos ni la retórica antisemita ni una política ajena a nosotros de aislamiento y segregación del Estado de Israel. Reestableceremos relaciones con Israel, que no significa apoyar sus políticas.
—¿Qué posición tendrán con Estados Unidos?
– Será soberana, atenderá a nuestro interés nacional; Washington es nuestro cliente principal; no parece lógico que no tengamos relaciones diplomáticas a nivel de embajador.
Nuestros intereses en ese país, nuestro principal socio comercial, estarán mejor representados y defendidos si tuviéramos un embajador allá. Las relaciones con Estados Unidos hay que normalizarlas.
–¿Cómo normalizarlas?
– Aquí hay una embajada de ese país sin embajador y un encargado de negocios al que no recibe ningún ministerio; no es normal.
—¿Firmará Capriles un acuerdo antinarcóticos con Washington?
– Hay que hacer uno conveniente a los dos países y negociado con soberanía; no un pacto de adhesión en el que nos dicen qué hay que hacer y solo firmamos. El narcotráfico es un delito transnacional; pensar en una lucha unilateral o bilateral es quimérico. Además, hay que atacar la causa, el consumo.
Sólida relación con Colombia:
–La MUD asegura que América Latina será eje de las relaciones del gobierno de Capriles. ¿Qué pasará con el Alba?
– Con el Alba estamos dispuestos a dar una respuesta cuando sepamos qué es, qué beneficio nos trae. Lo natural es tener una política cuyo primer interés sea América Latina, pero hay que revisar la situación de la integración. Hay que tener una política exterior más práctica, centrada y con intereses claros.
–Capriles dijo que se volverá a la CAN ¿Qué pasará con el ingreso a Mercosur?
– Cuando hizo esa declaración estaba diciendo una realidad; ése es nuestro ámbito natural. Hay que ver cómo podríamos volver. En el caso de Mercosur, ¿hemos negociado con cuidado al interés venezolano? Hay que verlo para saber las estrategias a seguir.
–¿Qué relación diplomática se tendrá con Colombia?
– Siempre es positivo cuando nuestras relaciones mejoran; nunca hubiéramos permitido que empeoraran como ocurrió. En un gobierno de Capriles, como hay mayor más afinidad con el colombiano, la cooperación será más sólida. La relación personal entre los presidentes influye en la diplomática, pero los nexos entre países no pueden depender de cómo se lleven.
–¿Qué posición tendría el gobierno de Capriles hacia la guerrilla colombiana?
– No puede haber ningún lugar de la geografía nacional donde la soberanía no la ejerza el Estado. Los únicos que pueden cobrar impuestos son el Seniat y los municipios; solo la FAN puede garantizar la seguridad. A nuestros vecinos tenemos que exigirles que garanticen la seguridad en su territorio. En los últimos tiempos, el Gobierno de Colombia ha dicho que Venezuela coopera con él; si es así, con nosotros continuará.
Por: ARMANDO AVELLANEDA
AAVELLANEDA@EL-NACIONAL.COM
Politica | Opinión
MUD | Diplomacia
EL NACIONAL
LUNES 23 DE ABRIL DE 2012
