Legisladores impidieron el paso
a funcionarios de Polimonagas
■ El gobernador introdujo un recurso ante tribunal contencioso contra la toma de la policía regional.
Funcionarios de la Policía de Monagas intentaron tomar ayer en la mañana las instalaciones del instituto de Obras Públicas, dependencia adscrita al Ejecutivo regional, pero legisladores de la entidad que apoyan la gestión del gobernador José Gregorio Briceño se apostaron en los portones de las instalaciones e impidieron el paso a los agentes.
Entre los legisladores se encontraban María Mercedes Aranguren, diputada por Monagas ante la Asamblea Nacional; José Moreno, presidente del Consejo Legislativo regional, y Carmen Elena Urrieta, parlamentaria de la entidad.
Al ver la reacción de los diputados, los funcionarios policiales optaron por colocarse a cierta distancia del organismo y luego se retiraron.
Se pudo conocer que la acción policial se debió a que Polimonagas recibió un aviso de que en la sede de Obras Públicas estaban guardados los repuestos de aproximadamente nueve patrullas, que presuntamente fueron sustraídas del cuerpo policial por orden de Briceño.
Edgar Márquez, director de Obras Públicas, indicó que lo que hay en los estacionamientos de la sede son tres cosechadoras y un tractor, propiedad del Gobierno Nacional, y aseguró que las entregará luego de que les sean solicitadas por escrito.
El intento de toma de la dependencia de la gobernación se produce luego de que el lunes un grupo de policías se apropió de los equipos de comunicaciones de Polimonagas, pertenecientes al servicio 171, que hasta esa fecha permanecían en manos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Recurso legal:
Mientras ocurría la situación irregular en Obras Públicas, el gobernador Briceño acudió al Tribunal Quinto Agrario de lo Contencioso Administrativo para introducir un recurso en contra de la toma de la policía regional y pedir que se recupere el orden institucional en el estado.
La decisión de Briceño de recurrir a los tribunales se debe a que, luego del enfrentamiento con el Gobierno nacional por el derrame petrolero, el gobernador solicitó la remoción de Luis Arrayago del cargo de director de la policial regional, pero este afirmó que sólo lo podía sacar del puesto el ministro de Relaciones Interiores y Justicia, Tareck el Aissami.
Esto fue calificado por Briceño de golpe de estado.
La situación irregular en el cuerpo policial se produjo casi en paralelo con la decisión de la dirección nacional del PSUV de sancionar al Gato Briceño, lo que condujo a su expulsión del partido.
Ante las acciones del Gobierno nacional, ayer el gobernador instó a los representantes del Ejecutivo a que le abran un proceso legal. “Vengan por mí, méteme preso”, enfatizó.
Antes los rumores de que el alcalde del municipio Libertador, José Figuera, no continuará apoyándolo en sus aspiraciones políticas como independiente, Briceño afirmó: “No voy a descalificar a nadie, si tengo que quedarme solo peleando por una causa, me quedaré”.
Policía paralela:
El director de la policía estadal, Luis Arrayago, afirmó que el gobernador Briceño mantiene una policía paralela. “Son aproximadamente 300 hombres que fueron destituidos de Polimonagas por estar involucrados en delitos y que hoy de manera ilegal quieren formar un cuerpo de seguridad con las armas de Polimaturín”, expresó.
Hizo un llamado a Cesar Barrios, director de Polimaturín, para que no le tenga miedo al alcalde de Maturín, José Vicente Maicavares, quien respalda la gestión del gobernador.
En rueda de prensa, Manuel Villalba, integrante de la directiva regional del PSUV, exigió respeto para Arrayago. Instó al gobernador a presentar pruebas ante los entes correspondientes, como la Fiscalía, en contra del director policial.
“Desde el partido rechazamos la descalificación contra Arrayago, el momento que nos toca es de unidad y lucha, nos toca una democracia participativa y democrática y eso no le gusta a él (Briceño)”, aseveró.
Aumentarán bombeo a Maturín:
La cantidad de agua que se envía a Maturín desde la planta de Bajo Guarapiche aumentará de 680 a 1.300 litros por segundo, después de que se reactive la cuarta de las seis bombas que tiene la llamada toma vieja de la potabilizadora, y empiecen a funcionar hoy dos bombas de la captación nueva, informó la presidenta de Aguas de Monagas, Gabriela Yánez.
Indicó que con esta medida se beneficiará a 60% de la población que se quedó sin agua por tubería debido al derrame de crudo del 4 de febrero que afectó el río Guarapiche. Agregó que por ahora las zonas altas de la ciudad seguirán surtiéndose a través de las cisternas.
Yánez señaló que aunque las lluvias han permitido la limpieza del río, aún persisten trazas de contaminación.
Por: JAIME LEAL
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EL NACIONAL
Miércoles 28 de Marzo de 2012
