Artillería de Oficio
El viaje del papa Benedicto XVI a Cuba se está leyendo desde distintos abecedarios: desde los que afirman que es una calculada misión apostólica, los que creen que es una legitimación vaticana al castrismo, hasta los que ven al pontífice como mediador en una transición entre el poder y la oposición.
En la medida en que la Iglesia gane libertad en Cuba, será más fácil una salida gradual, moderada y sin traumas. El comunismo difícilmente sobrevivirá a Fidel Castro, que percibe la muerte a la vuelta de la esquina, en cambio, la Iglesia es perdurable. Benedicto envía mensajes políticos abiertos a interpretaciones anticastristas cuando habla del sentido religioso de la libertad; se la ha jugado, aunque desde la moderación. En la misa que el Papá impartirá hoy en la Plaza de la Revolución, entre una imagen religiosa y el retrato del Che, lanzará otra de sus estudiadas alocuciones para que los cubanos obtengan una visión más clara de la salida del túnel.
Cuando el Papa levante vuelo, los Castro intentarán colocar a la Iglesia en su sitio, pero será inútil, el fervor de millones de cubanos y las palabras alentadoras del sumo pontífice para que luchen por otro modelo de sociedad abierta, les hará perder gran parte del miedo.
Hay que tener en cuenta el momento político-emocional cubano. Ha comenzado una dinámica de cambio, no son sólo las valientes Damas de Blanco y los disidentes internos que se manifiestan cada vez más, como el hombre que tomó un micrófono en plena plaza Antonio Maceo, en Santiago de Cuba, y antes de que el Papa celebrara la misa gritó: “Abajo el comunismo”, a sabiendas de que sería golpeado y detenido. El efecto de esta visita sobre la vida de los cubanos empezó a notarse. Sin duda, estamos ante uno de los viajes más rentables del Papa. Benedicto XVI también es consciente de que lo que diga en Cuba tiene un reflejo en los países de América Latina, donde la Revolución cubana pese a su estruendoso fracaso ha sido un elemento de referencia. Por lo pronto, la Iglesia está ganando más facilidades y espacio que Changó y Ochún.
Tic tac
Última voluntad. Hugo Chávez quiere pasar a la historia como el hombre que le devolvió la paz a Colombia. El presidente Santos pretende que Chávez le entregue a los cabecillas de las FARC, Iván Márquez y Timochenko. Entre radiación y radiación tomará la decisión.
Narcoestado. Desde que pasó a situación de retiro y fue promovido de fiscal militar a magistrado del TSJ, Aponte Aponte empezó a constituir un clan con fiscales y jueces cómodos, sobre todo en la frontera, por donde circulaba la droga de la guerrilla colombiana que intercambiaban por armas, municiones y provisiones a través de Walid Makled. Aponte Aponte nunca actuó solo, sino con los llamados narcogenerales. Según informes de inteligencia, cuando Makled cayó en la mala y salió corriendo hacia Colombia, ya Aponte había lavado alrededor de 700 millones de dólares, colocados en bancos asiáticos, listo para inversiones. Cuando le exigieron que entregara el dinero para financiar la campaña electoral, aseguró que se lo había devuelto a Makled. Por eso vino el pase de factura, que ahora es utilizado para hacer creer que en el Gobierno no hay vacas sagradas.
Adoctrinamiento y entrenamiento. El personal militar del cuartel 4F de la Fuerza Armada Bolivariana con sede en La Planicie del 23 de Enero comenzó la semana pasada la integración del Cuerpo Combatiente del Banco de Venezuela para defender esa institución.
Los trabajadores fueron convocados mediante circular: “Comienza a prepararte física y mentalmente para proteger nuestro banco, porque el Banco de Venezuela somos todos”… tic tac.
Por: MARIANELLA SALAZAR
msalazar@cantv.net
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