¿No somos un país soberano?
La “sensación” que los “enemigos de Venezuela” quieren dar criticando el servicio exterior venezolano, afirmando, que está conducido por un chofer de autobús y siguiendo las instrucciones de un paracaidista paranoico, es vergonzosa. Ahora resulta que nuestros funcionarios para las embajadas y consulados son policías, expertos en inteligencia que montan operaciones internacionales para la desestabilización de los gobiernos que los acogen; pero la verdad es que el Ministerio de Relaciones Exteriores está dirigido por un experto internacionalista, como lo es Nicolás Maduro, y a las órdenes de uno de los presidentes más serios y circunspectos del orbe, Hugo Chávez Frías, respetuoso de la libre determinación de los pueblos, un líder equilibrado y tolerante.
Lo que sucede, es que las comunidades de venezolanos viviendo en el exterior, sobre todo en los países del primer mundo, son todos unos traidores y golpistas, que no merecen ni los buenos días, se la pasan conspirando en contra del gobierno revolucionario; algunos grupos, como los que habitan en la ciudad de Miami han tenido la osadía de convencer al gobierno norteamericano para que los ayude a montarle al personal del consulado una campaña de terror y acoso, han logrado algo inaudito, ¡que el Departamento de Estado expulse de ese país a la Cónsul del gobierno venezolano!
Los funcionarios de la cancillería venezolana son todos personal de carrera, profesionales altamente calificados en el difícil arte de las relaciones internacionales, no hay improvisados ni amateurs, todos dominan varias lenguas, tienen una cultura prodigiosa, son humanistas.
Que son falsas de toda falsedad esos rumores de que tenemos gente asociada a las FARC o al ETA trabajando en ese ministerio, nuestras relaciones con el mundo son ejemplo mundial de sindéresis, si no pregunten en Cuba donde tenemos un modelo de embajada y consulado, o en China, o en Rusia, o en Bielorrusia, o en Vietnam.
Pero donde hay venezolanos escuálidos es donde tenemos problemas, por lo que, de ahora en adelante, nuestras embajadas y consulados no atenderán más a estos indeseables, sólo los que vistan de rojo rojito, los que no aparezcan en las diferentes listas que tenemos de conspiradores, y presenten una carta que dé fe de su lealtad revolucionaria por parte de un miembro activo del PSUV… sólo ellos serán debidamente recibidos, de hecho, el CNE, para hacerles la tarea de votar en contra de la revolución más difícil, ha cerrado sus facilidades en muchas ciudades de estos países, de esta manera van a tener que viajar largo y pasar trabajo para que se den “el gustico”.
Es falso que usamos la valija diplomática para ayudar a los regímenes tiránicos del mundo, o que enviamos dinero para campañas electorales, o cheques para sostener gobiernos impopulares… eso son patrañas creadas por la CIA, menos mal que nuestra cancillería es modelo continental en transparencia y de amor por la humanidad, allí están nuestras instalaciones en Caracas ocupadas por gente necesitada que perdió sus hogares.
Nuestro esfuerzo internacional se ha concentrado en adecentar los organismos multilaterales y no en destruirlos, como algunos han dicho, estamos dando respuestas modernas y articuladas como el ALBA, creando un nuevo orden económico en la región y una nueva moneda como El Sucre, nuestra actuación en el Mercosur será renovadora pues le daremos la estocada final a instituciones moribundas como la OEA, el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y otros espantos que todavía apoyan al capitalismo en Latinoamérica.
Nuestro único y verdadero deseo es acabar con el imperialismo yanqui, que nuestros hermanos cubanos, sirios e iraníes tengan un soporte mundial en nuestras embajadas y consulados, ¿Qué hay de malo en eso? ¿No somos un país soberano? ¿No son nuestros pasaportes reconocidos en el mundo entero como documentos de identidad de los revolucionarios de verdad?
Los venezolanos que no estén de acuerdo con esto, favor abstenerse de usar nuestras instalaciones y molestar a nuestro personal, menos aún de hacer trámites de documentos de identidad o cursar reclamos por Internet, sobre todo si se trata del Registro Electoral y del Saime, si su información en nuestro banco de datos es incorrecta o quieren cambiarla deben esperar que venga un gobierno de la ultraderecha (esperen sentados), tenemos cosas más importantes que hacer, y por cierto, no sigan repitiendo que el cierre del consulado en Miami es para evitar que voten en nuestra contra, somos incapaces de tamaña violación masiva de derechos humanos, se trata apenas de una medida administrativa y para proteger a nuestro personal en territorio enemigo.
Por: SAÚL GODOY GÓMEZ
saulgodoy@gmail.com
EL UNIVERSAL
martes 27 de marzo de 2012
