Denuncian que en Sidor continúan
las mafias “rojias” de cabillas
■ Sidor opera al 60% de su capacidad.Persisten los conflictos.
■ La nómina de la siderúrgica aumentó 180% en 3 años, al pasar de 4.000 trabajadores en 2008 a 11.200 en 2011
■ Los sindicalistas y militantes del PSUV se acusan mutuamente de sabotear el proceso productivo de las empresas básicas y de estar incursos en hechos de corrupción.
■ “Las pugnas han causado el deterioro de la planta”, afirma Leonel Grisett, de Sutiss. Con el esquema de gestión socialista se han multiplicado las gerencias, los cargos burocráticos y, también, la irritación de los sindicalistas, pero no se han superado los problemas.
Los problemas de la Siderúrgica del Orinoco llegaron a Caracas. El presidente de la Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Siderúrgica y sus Similares, José Luis Hernández, cuestionó las críticas hechas por el dirigente José Melendez, miembro de esa organización gremial y del movimiento Alianza Sindical, quien denunció que persisten las mafias en las ventas de cabillas.
“Hay dirigentes que parecieran que están buscando la quiebra de Sidor y nunca dijeron nada de lo que pasaba cuando la empresa era manejada por Ternium”, dijo Hernández durante una rueda de prensa n Caracas. “Se ha ido resolviendo el problema del personal tercerizado mediante la incorporación a la nómina de la siderúrgica”, añadió.
Indicó que para el momento de la estatización en 2008, Sidor tenía alrededor de 4.000 trabajadores y al cierre del año pasado la plantilla laboral de la empresa se elevó a 11.200 personas, lo que implica un incremento de 180% en 3 años.
Mientras la siderúrgica opera a 60% de su capacidad.
Hernández elogió la actuación que ha tenido el Ejecutivo nacional en el desempeño de la compañía. Sin embargo, sí cuestionó que desde mediados de 2010, tras vencerse el contrato colectivo, no existen avances en la negociación de una nueva convención.
Hechos en Guayana. El “auto- nombramiento” de gerentes y comisiones en Sidor es lo que irrita a los dirigentes del movimiento Alianza Sindical. “Luego de que se autonombró una comisión, en la que están José Luis Hernández, Néstor Astudillo (presidente de FerreSidor y gerente de Promoacero) y Carlos D’Oliveira (presidente de Sidor), no se acabaron los problemas sino que se agravaron más. Antes por lo menos se conseguían cabilllas”, declaró en Guayana Pablo Montilla, también de Sutiss.
El Movimiento Alianza Sindical sostiene que las mafias en las ventas de productos de acero se mantienen. “Las irregularidades en la comercialización de las cabillas continúan ahora de la mano de D’Oliveira”, afirma esta organización.
En Puerto Ordaz militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela se acusan entre sí de sabotear la fábrica y de estar inmersos en actos de corrupción. La dirigencia adversa y los trabajadores cuestionan el deterioro de la planta y la caída de la producción.
“No es un secreto para nadie que la pugna, basada en la conquista de territorios políticos, está llevando la empresa a la destrucción. Esa pugna da al patrono la excusa de no discutir el contrato colectivo. Peor aún, está llevando al deterioro total de la planta”, expresó Leonel Grisett, vocal de Sutiss.
El director laboral Jhonny Luna cree que el forcejeo permanente entre “revolucionarios” se está haciendo una práctica común, que sólo tiene un fin político. “Esta práctica la encabeza el mismo presidente de la empresa Carlos D’Oliveira, el Frente Revolucionario de Trabajadores Siderúrgicos por la parte gerencial, el Movimiento Orinoco y Alianza Sindical, por la parte sindical”, denunció.
“Sidor tiene enfermedades que son curables, pero deben deponerse algunas conductas por el bien de la administración. Debe existir voluntad, actitudes y aptitudes por parte de los responsables, para que junto sigamos construyamos el camino”, acotó.
Parte de las críticas están relacionadas con la multiplicación de gerencias bajo un nuevo esquema de gestión socialista que, a juicio de Luna, ha generado más burocracia y desconfianza de los sidoristas.
Por: CLAVEL RANGEL
CIUDAD GUAYANA
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EL NACIONAL