En los barrios de Caracas quieren
votar en las primarias de la MUD
■ 58,4% del estrato C de la población piensa sufragar, al igual que 59,7% de la clase D.
■ Habitantes de sectores populares desean escoger a un candidato que represente un cambio de rumbo.
Habitantes de distintos barrios de Caracas aseguraron que participarán en las primarias. Para muchos es necesario un cambio y celebran que puedan elegir entre varios nombres, sin que se lo impongan. Afirman que el miedo a votar ha disminuido y piden a la oposición que la unidad se mantenga después del 12 de febrero.
La intención de voto en los sectores populares es alta, de acuerdo con la encuesta de octubre de 2011 del Instituto Venezolano de Análisis de Datos.
58,4% de las personas de la clase C piensa sufragar y el número aumenta a 59,7% en las respuestas de la clase D.
Para Vilma Sosa, costurera de 46 años de edad que vive en el barrio San Miguel de La Vega, en Caracas, es un éxito la convocatoria a unas elecciones primarias para que sea la gente y no los partidos la que escoja a los candidatos que competirán por los distintos cargos de elección popular.
“Es un hecho que nunca había vivido en mis 46 años. Uno votaba por la tarjeta grande, que era la del candidato presidencial impuesto por el cogollo del partido y ni siquiera sabía a quién elegía con la chiquita. A la gente de los cerros nunca nos preguntaron si nos gustaba ese candidato”, dijo.
Para ella, la participación en las primarias de la oposición es su forma de protestar contra un gobierno que no ha llevado el bienestar a su comunidad. “San Miguel es un barrio olvidado. Aquí vinieron Luis Herrera, en los años 80, y Caldera, en los 90; acometieron algunas obras de importancia, pero desde entonces más nunca. Yo votaré porque siempre lo he hecho y porque quiero que mis hijos y nietos vivan en una democracia total, y no en una democracia a medias como la que tenemos”.
La redoma de Petare, en el municipio Sucre, sólo descansa dos días al año: el 25 de diciembre y el 1º de enero. El resto, es un rebullicio de cornetas, motos, vendedores ambulantes, paradas de autobús, borrachines, comerciantes formales, indigentes y estudiantes.
Un elemento se suma al alboroto de esta zona: uno de los precandidatos de la oposición hace un recorrido y despierta el interés de la gente. Es el caso de Germán Javier Jiménez, de 49 años de edad, que vive en el barrio El Carmen y hace una parada en una farmacia para saludar al regente antes de irse de viaje al interior.
Aunque Sosa no se identifica con el precandidato que estaciona el camión frente a la farmacia, afirma que sí votará en las primarias. “Es importante participar porque es la forma de ayudar a que haya un cambio”, señaló.
Valor en el 23:
Algunos habitantes de la parroquia 23 de Enero, en el oeste de Caracas, no predicen fuego para el próximo 12 de febrero, sino participación.
Desde el corazón del sector, en el Bloque 22-23, Yurima Jiménez, de 47 años de edad, defendió la idea de ir a votar: “Me motiva participar porque quiero un cambio, quiero que el país vaya hacia delante y no siga estancado en lo económico, en la inseguridad y hasta en la educación”.
Cree que la campaña de temor en la zona es más un mito que una realidad. “Quienes intentan meterle miedo a la gente, la subestima. Se sabe que quien vote quiere un cambio, pero el voto será secreto y, además, no es cierto que aquí en el 23 todos tienen miedo de salir”.
Elegir al mejor:
El sábado en la mañana las personas hacían cola para comprar comida en el mercado de la redoma de Las Minas de Baruta. Luis Moreno tiene 19 años de edad y esperaba un autobús para ir a su trabajo en una tienda de un centro comercial. Considera que es importante votar en las primarias de la oposición y dice que en su familia todos piensan hacerlo. ¿Por qué? “Porque hay que escoger al mejor para enfrentar al Presidente. Hasta los chavistas deberían votar para escoger al mejor, por si acaso pierde Chávez”, afirmó riendo.
Uno de los precandidatos recorrió el barrio esa mañana, entregó juguetes y expuso sus propuestas. El plomero José Cruz caminaba por la zona agarrado de la mano con su nieto cuando vio la actividad y colocó al niño en la fila para recibir un regalo.
Mientras esperaba, comentó la importancia de votar el 12 de febrero: “Estos son muchachos jóvenes a los que hay que darle una oportunidad. Ya es hora de un cambio”.
Cerca de Cruz, el taxista William Meléndez escuchaba la conversación y no pudo evitar interrumpirlo para agregar que lo más importante, a su juicio, es que los que pierdan apoyen a quien gane en todos los cargos.
“Si después de que uno escoge empieza a ver que se echan tierra entre ellos, uno se decepciona y ve que son lo mismo de siempre”, expresó.
Involucrados:
Un grupo de vecinos del sector Vuelta del Beso, en el barrio Unión de Petare, tiene algo muy claro: hay que trabajar por los intereses de la comunidad sin que importen las tendencias políticas. Por eso coinciden en que es necesario participar en las primarias.
En la zona coordinan, en la misma área, un Infocentro del Gobierno, un Club de los Abuelos de la Alcaldía de Sucre y una Casa de la Cultura de la Gobernación de Miranda. “Estamos creando redes populares en cada sector del barrio para conocer los problemas de las familias y buscar soluciones. Les explicamos a las personas por qué es importante salir a votar el 12 de febrero”, expresó Edmundo Rada, activista de la zona.
Su madre, Nelly de Rada, fundó la Casa de la Cultura y el Infocentro, y pertenece al consejo comunal. Aclara que hay que luchar para que la comunidad obtenga todos los beneficios que pueda, y afirma que la mayoría de los vecinos participará en las primarias porque considera necesario un cambio.
Sentada junto a Rada está Yasmín de Balladarez, que trabaja en el Club de los Abuelos. Antes que nada, aclaró que votará por Chávez, pero aseguró que participará en las primarias para elegir quién será su alcalde y su gobernador porque no le gustan los nombres que propone el oficialismo.
En los barrios caraqueños saldrán el 12-F a escoger el candidato opositor que lidere un cambio de rumbo. 58,4% de la clase C piensa sufragar, al igual que 59,7% de la clase D
Habitantes de varios sectores populares celebran que puedan elegir entre varios nombres. “Es un hecho que nunca había vivido en mis 46 años. Uno votaba por la tarjeta grande, que era la del candidato presidencial impuesto por el cogollo del partido. A la gente de los cerros nunca nos preguntaron si nos gustaba”, señala Vilma Sosa, del barrio San Miguel de La Vega. En el 23 de Enero dicen que el temor no se impondrá. “Quienes intentan meterle miedo a la gente, la subestima. El voto será secreto”, afirma Yurima Jiménez, en el Bloque 2223. Consideran fundamental que los candidatos mantengan la unidad después de que se realice la elección de base.
Por: MARU MORALES
ALEX VÁSQUEZ S.
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