¡Unidad y compromiso!
A tres días de las elecciones primarias las cuales decidirán quien será el candidato opositor, el Gobierno intenta profundizar su estrategia divisionista buscando persuadir muy subliminalmente para que las personas no asistan masivamente a las urnas electorales el 12 de febrero. A pesar de la suspensión de los actos del PSUV y el falso llamado presidencial a la participación, está el deseo gubernamental de generar desconfianza y abstención.
Esta semana reaparecieron los “ataques” hacia la Mesa de la Unidad Democrática a través de las redes sociales, muchos quienes se consideran “opositores” no le dan el visto bueno al proceso electoral organizado por el Consejo Nacional Electoral, un punto muerto cuando hace más de 4 meses se tomó la decisión.
Una baja participación será tomada como triunfo por parte del Gobierno, por ello es importante ir masivamente a elegir el candidato. No es justo que después de 13 años de gobierno chavista y con tantos desafueros, sea necesario llamar a votar. Los venezolanos tienen que asumir su rol ciudadano y estar consciente que si desean un cambio democrático es el año para lograrlo.
Es preciso unidad y compromiso, mientras algunos opositores se dividen el Gobierno sigue en su proceso de radicalización, esta semana en la Asamblea Nacional asumió la presidencia Diosdado Cabello, quien antes de tomar posesión de su nueva cargo expresó que con él “no hay conciliación posible”, algo ya conocido por todo el país. En donde ratificó que la Asamblea Nacional es un espacio para el presidente Chávez, es decir, el pueblo quedó como decorado del discurso oficial.
En el acto de juramentación de la nueva directiva de la Asamblea Nacional, se demostró el tradicional estilo de gobierno, el cual se fundamenta en el abuso, la arbitrariedad que traspasa límites insospechados. Una razón más para salir masivamente a votar y ponerle fin a tanto atropello.
Un dato importante en los comicios opositores es que no existirán captahuellas y que los cuadernos de votación serán destruidos, lo que permite tener mayor confianza en el proceso. No hay miedo que haga mella en el deseo de los ciudadanos que aspiran el cambio. Llegó el 2012 y no hay espacio para el temor, sino para la acción de todos los ciudadanos, gobernadores, alcaldes y diputados opositores quienes tienen la responsabilidad de impulsar la participación, en especial de los empleados públicos para que puedan ir a ejercer su derecho sin problemas.
Un importante espacio que será antesala para el 7 de octubre, seguro que la campaña de desprestigio aumentará con el paso de los días, es preciso no desviarse del objetivo.
¡Manos a la obra!
Por: ORIAN BRITO PEÑA
orianjesusbrito@gmail.com
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EL UNIVERSAL
sábado 07 de enero de 2012
