Denuncian manipulación mayor de
la memoria colectiva del país
■ El general Rangel Silva organiza festejos del 4-F.
■ Chávez ordenó suspender marcha del 12-F en Caracas.
■ Costo por los concursos del 4-F no están presupuestados.
■ Celebración de 20 años del 4-F convierte un fracaso en epopeya.
■ Avisos alusivos a la asonada militar han costado más de Bs 436.000.
■ Elías Pino alertó sobre el intento de manipular la memoria colectiva del país.
■ La convocatoria a concursos de crónica, pintura, fotografía, una película con Chávez en persona como protagonista principal y un “monumento a la dignidad” se incluyen en los gastos millonarios no presupuestados.
■ El jefe del Comando Estratégico Operacional de la FAN presidirá el comité que designó el Gobierno para la celebración de los 20 años de los golpes de Estado fallidos contra el sistema democrático del 4 de febrero y del 27 de noviembre de 1992. Ambas fechas serán denominadas “Día de la Rebelión Popular” o “Día de la Rebelión Cívico Militar”.
La idea de la conmemoración nació del propio jefe del Estado, que el pasado 10 de diciembre pidió una autocrítica a sus colaboradores y anunció la creación de una comisión presidencial, encabezada por Diosdado Cabello, para organizar las actividades.
Ni los actos anunciados por el Ministerio de Cultura (los avisos cuestan más que los premios), ni la película ni la comisión tienen presupuesto propio. El cineasta Oscar Lucien señaló la ausencia de métodos democráticos para la selección del cineasta que realizará la película, encargada a Carlos Azpúrua.
Filme casi listo: El cineasta Carlos Azpúrua considera un elogio por haber sido seleccionado para dirigir el documental. Dijo que cuenta con una aproximación al guión y expresó confianza en que podrá estar listo para ser estrenado el 4 de febrero.
Laureles inexistentes: El historiador Elías Pino Iturrieta afirma que el Ejecutivo adelanta una estrategia que busca modificar la sensibilidad de las mayorías. “El vencedor siembra sus laureles aun cuando éstos no hayan existido jamás”, dijo.
Más de 560.000 bolívares erogará el Ministerio de la Cultura para pagar el costo de un proyecto que no fue incluido en el presupuesto de 2012 y por lo tanto no cuenta con una partida propia.
Bajo el nombre “4F Revolución de Febrero”, la cartera dirigida por Pedro Calzadilla programó una serie de concursos y actividades culturales para celebrar los 20 años de la asonada militar protagonizada por el actual Presidente. Los ganadores serán anunciados el próximo 4 de febrero, cuando además se estrenará un documental dirigido por el cineasta Carlos Azpúrua, que podría tener como protagonista al propio jefe del Estado.
La idea de la celebración no nació del Ministerio sino del primer mandatario, quien el pasado 10 de diciembre lanzó una autocrítica a sus colaboradores porque hasta la fecha no existiera una película reflexiva sobre la fallida acción castrense.
Días más tarde anunció la creación de una comisión presidencial para la organización de las actividades conmemorativas.
Luis Pellicer, director del Archivo General de la Nación, aclaró que no existe un decreto de creación de tal instancia, por lo que la misma tampoco tiene un presupuesto propio. Informó que fue notificado mediante un memo interno del ministerio que la comisión sería presidida por el diputado Diosdado Cabello mientras a él le correspondería coordinar la comisión ministerial.
“Los fondos para los premios saldrán del presupuesto para concursos de las fundaciones y organismos adscritos a este despacho que participarán en las actividades”, aclaró Pellicer.
Paradoja socialista:
La publicación de las convocatorias en los medios impresos costará más de lo que pagará el ministerio a los ganadores de las seis categorías abiertas. Todas las obras concursantes deberán reflejar una interpretación artística del golpe de Estado.
Hasta el momento, el despacho de cultura habría desembolsado un mínimo de 436.914 bolívares de su presupuesto por la publicación de la convocatoria de 3 páginas en un medio de circulación nacional. Pellicer indicó que el aviso se ha publicado una vez en diciembre y dos en enero y que antes del cierre de la recepción de las obras saldrá nuevamente.
Entretanto, la suma total de los premios para las seis categorías apenas supera los Bs 130.000.
El Museo Nacional de Arte Popular entregará 3 premios de Bs 20.000 cada uno en la categoría Salón de Arte Popular (pinturas, dibujos, talladuras) y otros 20.000 a la categoría de Monumento a la Dignidad.
Otro de los premios correrá por cuenta del Museo de Bellas Artes y se trata de una escultura que participará en la categoría Salón Nacional de Estatuaria; el ganador se llevará Bs 20.000 más la realización de la obra por parte del ministerio.
El Centro Nacional del Libro se hará cargo del concurso de crónicas (premio único de Bs 10.000 y publicación) y de la competencia de poesía, décima y coplas (premio único de Bs 10.000). Se abrirá también un Salón Nacional de Fotografía cuyo galardón (Bs 20.000 y 3 cámaras fotográficas) será costeado por el Centro Nacional de Fotografía.
Por último se abrió el Proyecto Memoria de la Dignidad que será una especie de museo de la revolución bolivariana.
Ilegalidad presupuestaria:
Para el historiador Elías Pino Iturrieta los actos conmemorativos del 4-F obedecen a un proceso de manipulación mayor de la memoria colectiva. Consideró que el Ejecutivo adelanta una estrategia para modificar la sensibilidad de las mayorías y trasformar en epopeya lo que fue un fracaso. “El vencedor siembra sus laureles, aun cuando esos no han existido jamás”, dijo.
Pino Iturrieta señaló que los recursos públicos que el Presidente invierte en esos actos responden a su afán de presentarse como el continuador de Bolívar y de cambiar lo transitorio con lo vitalicio. A su juicio esta es una revolución con pies de barro que carece de soporte.
Denunció que en la última década no ha existido legalidad presupuestaria, por lo que rechazo que los gastos no hayan sido establecidos en el presupuesto nacional. “El Gobierno sigue una estrategia de improvisación”, agregó.
El historiador también lamentó que los funcionarios obedezcan a Chávez sin chistear y que permitan este tipo de acciones fuera del presupuesto.
A nueve meses de las presidenciales, las encuestas no le son favorables al oficialismo, dijo Iturrieta, al tiempo que consideró que la estrategia sería manipular el pasado reciente. “Su estatua ya no tiene pedestal y la busca en la magnificación del golpe”.
Sostuvo que la rebelión militar del 23 de enero de 1958 fue un movimiento colectivo, mientras que el 4-F se caracterizó por la frialdad de la sociedad.
Película sin concurso:
El cineasta venezolano Carlos Azpúrua se consideró elogiado por haber recibido la confianza del Presidente para dirigir el documental del 4-F. Confirmó que cuenta con una aproximación del guión y expresó su confianza en que será estrenado el 4 de febrero.
“Si hay alguien que puede evaluar lo que fue la cuarta república, la distorsión del hecho político que generaron AD y Copei, la violación de los derechos humanos, soy yo porque lo viví como venezolano y como político cuando militaba en la Causa R”, indicó.
Aunque no precisó cifras, aseguró que la realización de la pieza no será costosa. “Va a salir relativamente económico. Yo sé cuánto vale mi trabajo, pero no lo estoy haciendo por el dinero, no me voy a hacer millonario con él. Lo hago por mi deseo de contribuir a una reflexión crítica y profunda de lo que significó el 4-F y de lo que hemos avanzado, como lo pidió el comandante presidente”. Agregó que contará con el archivo de la Villa del Cine y la Cinemateca, además del apoyo de otras instituciones.
El cineasta Oscar Lucién rechazó que el Gobierno no aplicara los mecanismos democráticos a través de un concurso abierto para decidir quién realizaría el documental del 4-F. “No existe una sola realidad de ese día, cuando los militares se fueron en armas y murieron inocentes. Estamos interesados en hacer una película de lo sucedido para mostrar cómo se irrespetó la Constitución y la voluntad popular”.
En opinión de Lucién se pretende imponer una visión sesgada de lo que ocurrió y que el pueblo vea el 4-F como una fecha patria.
Rangel Silva presidirá comité del 4-F:
Para la preparación de los actos cívico-militares en conmemoración de los 20 años del fallido golpe de Estado del 4 de febrero de 1992, el Gobierno designó un comité central cuyo presidente es el general en jefe (Ej) Henry Rangel Silva, jefe del Comando Estratégico Operacional de la FAN.
Se asignaron subcomités para programar aspectos militares, logísticos y mediáticos Entre los miembros de los subcomités están el contralmirante retirado Luis Cabrera Aguirre, ex integrante del Estado Mayor Presidencial, y el teniente coronel retirado Héctor Herrera Jiménez, director del Frente Cívico Militar Bolivariano. Trascendió que el desfile será dirigido por el general de división (Ej) Carlos Alcalá Cordones.
En el desfile cívico-militar del 4-F se exhibirán las armas adquiridas por la FAN en el último año.
Fuentes militares informaron que se decidió fusionar la celebración de las intentonas del 4 de febrero y del 27 de noviembre de 1992 en una sola fecha que será el 4-F, para la cual se evalúa un nombre emblemático. Hasta ahora figuran las opciones de Día de la Rebelión Popular o Día de la Rebelión Cívico Militar.
Se espera que sea en febrero cuando el presidente Chávez cambie al ministro de la Defensa. El general en jefe (Ej) Carlos Mata Figueroa pasaría a retiro para ser el candidato del PSUV a la Gobernación de Nueva Esparta, como lo certificó Chávez en diciembre de 2011; y se proyecta que el general Rangel Silva asuma la cartera castrense.
Joel Acosta Chirinos, ex compañero de armas de Chávez el 4-F, dice que la conmemoración de la insurrección obedece al reimpulso determinante y definitivo del proyecto bolivariano. Reconoció que no se ha logrado el cometido de la revolución y señaló oportuno este tiempo para la reconciliación entre los revolucionarios.
Complot:
El vicealmirante retirado Mario Iván Carratú Molina, jefe de la Casa Militar del gobierno de Carlos Andrés Pérez, indicó que no existen razones para celebrar el fallido golpe de Estado de 1992, porque se violentó la Constitución. “La historia registra la rebelión militar del 3 y 4 de febrero de 1992 como un hecho estrictamente militar y eso no es cierto, se trató de un complot cívico-militar orquestado, articulado y puesto en ejecución utilizando al Ejercito para que una clase o elite político marxista comunista (ahora autodenominada progresista) tomara el poder”, expresó.
Cree que fue un error el indulto y los sobreseimientos otorgados a los militares golpistas.
Destacó que en el país hay un saldo de pérdida de libertades, corrupción e impunidad desde el poder, destrucción del sistema productivo y militarización de la gestión pública.
Jóvenes oficialistas en La Victoria:
Vano fue el énfasis de los voceros juveniles del Gran Polo Patriótico para dejar claro que los actos del Día de la Juventud eran una iniciativa propia y no del Ejecutivo. Ayer una de las integrantes del gabinete ministerial fue la encargada informar la suspensión de la movilización pautada para el 12 de febrero en Caracas.
“Quiero anunciarles que por instrucciones del propio presidente Hugo Chávez, él nos ha pedido que no realicemos ningún acto en Caracas para la celebración del Día de la Juventud. Vamos a hacer esa gran fiesta de la juventud en La Victoria, estado Aragua”, declaró María del Pilar Hernández, ministra de la Juventud.
La funcionaria explicó a VTV las motivaciones políticas de la decisión: “No le vamos a brindar a la oposición ninguna excusa que les permita encubrir el fracaso rotundo de su proceso electoral”.
Hernández consideró que las primarias de la Mesa de la Unidad Democrática, previstas para el 12 de febrero, serán un fiasco. A su juicio, el reclamo de los dirigentes de oposición contra la convocatoria a una movilización oficialista en Caracas ese mismo día no es más que un intento de encubrir su ineficiencia, su incapacidad y su poca convocatoria detrás de cualquier excusa.
Para la ministra, la oposición mantiene una visión distorsionada de la realidad nacional: “Ellos creen que el país limita por el este con el Parque del Este y por el oeste con el Centro Lido, y se olvidan que el país es muchísimo mas grande que Caracas”.
Mismos objetivos:
La Gran Fiesta por la Nueva Victoria del 7 de Octubre cambiará de lugar, mas no de fecha ni de objetivos. La ministra confirmó que los jóvenes del GPP entregarán al primer mandatario sus propuestas para el Plan Nacional Simón Bolívar 20132019 el 12 de febrero.
Tampoco cambiará el despliegue comunicacional pautada por el Gobierno para ese día, cuando se espera además que los trabajadores pro oficialistas consignen 1 millón de firmas en apoyo a la nueva Ley Orgánica del Trabajo que redactará el Ejecutivo.
“Tuvimos la oportunidad de ver declaraciones insólitas de algunos dirigentes de la oposición, quejándose porque los jóvenes van a celebrar el Día de la Juventud que es el 12 de febrero. Ese día no es el día de las elecciones de la oposición, eso es una coyuntura, toda la vida ha sido el Día de la Juventud y se ha celebrado”, indicó Hernández.
Any Higgins, vocera de la juventud del GPP, indicó que los integrantes del movimiento se reunirían en las próximas horas para definir la nueva logística de la movilización tras el cambio de ciudad.
Hasta el momento ni el Consejo Nacional Electoral ni el Ministerio de Interior y Justicia han emitido ninguna declaración relativa a la viabilidad de la masiva movilización organizada por el Gobierno.
Tradicionalmente se prohíben las reuniones públicas cuando hay elecciones.
Miedo no:
Al final de la tarde, luego de recibir en Miraflores a Miss Mundo 2011, la venezolana Ivian Sarcos, el presidente Chávez descartó que desde el oficialismo exista algún plan para boicotear las elecciones internas de la oposición.
“Me enteré de que el Gran Polo Patriótico quiere hacer una marcha el 12 de febrero.
Que la hagan. Los de la oposición, que hagan su elección tranquilos. Nosotros no necesitamos sabotear nada. Creo que los primeros saboteadores de ese proceso interno son ellos mismos”, dijo.
En un breve encuentro con los medios a las puertas del Palacio de Gobierno, el Presidente lamentó el retiro de la precandidatura del dirigente copeyano Eduardo Fernández: “Él hubiese sido un buen contendor, un político de trayectoria. Estos majunches no son políticos, en cambio Fernández es un político cuajado”.
Protagonista
Carlos Azpúrua, director del documental que se estrenará el próximo 4 de febrero, aspira a contar con la participación de Hugo Chávez como protagonista del filme.
“Quiero hacer algo para que el Presidente participe de manera vital. La idea es reconstruir tres momentos de ese proceso: primero la reflexión de los militares jóvenes sobre el país, segundo la decisión de dar el golpe y tercero los minutos que anteceden a esa breve y fundamental intervención de Chávez ante las cámaras, cuando asume la responsabilidad y orienta a los soldados a deponer las armas”, precisó.
“No es una película complaciente sino autocrítica, reflexiva. Creo que lo más complejo sería lograr la participación del Presidente; confío en que lo lograremos”.
Adelantó que el documental tendría una duración de 45 minutos.
El golpe se llevó la confianza:
Los efectos de Hugo Chávez sobre la economía del país empezaron el 4 de febrero de 1992, cuando dio el golpe de Estado fallido, y no en el momento en el que asumió la Presidencia, opina el economista Gerver Torres. En ese momento se interrumpió un proceso de reformas en la economía que apuntaban a la integración con el mundo, explica.
Dice que las mejoras económicas en ese momento eran notables, tanto que en 1991 Venezuela fue uno de los países que más creció en América Latina y, a pesar de la intentona del siguiente año, también la economía se expandió de forma significativa.
“A partir de 1992 se detuvo la confianza en el país, a pesar de que Venezuela tenía una de las democracias más sólidas en América Latina. La pérdida de confianza amenazó a numerosos procesos de inversión”, agrega.
Torres lamenta que muchos procesos de inversión quedaran congelados luego del golpe de Estado. Entre ellos destacó los proyectos de empleo, ingresos en divisas y de desarrollo tecnológico.
Aclara que, luego del golpe, en el gobierno de Rafael Caldera, se intentó retomar los proyectos, pero no hubo éxito. “En ese momento se planteó el programa denominado la Agenda Venezuela, pero de forma muy tímida y con condiciones adversas. Ya estaba planteada la precariedad política e institucional”.
Por: MARU MORALES
CARLA NAVARRO
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