Durante el fin de semana
hubo unos 63 asesinatos
■ Fueron maniatadas y torturadas.
■ Policía señala que hubo un ajuste de cuentas.
■ Las víctimas fueron tomadas por la fuerza cuando salían de un juego de softball en San Martín.
■ Los cuerpos presentaban signos de tortura, además les cortaron los dedos y les rompieron los dientes.
■ Entre el viernes en la tarde y el lunes en la madrugada fueron reportadas 63 muertes violentas en Caracas.
■ Estaban maniatados y tenían una cinta adhesiva alrededor de la cabeza. También fueron encontrados en Pinto Salinas los cadáveres de dos hombres cuando todavía ardían.
Los cadáveres de cuatro personas que aparentemente habían sido secuestradas fueron encontrados ayer en la madrugada en el interior de un vehículo que se incendiaba.
Las víctimas fueron identificadas como Carlos Eduardo Rodríguez, de 32 años de edad; Miguel Ángel Rodríguez Hernández, de 35 años; Wuil Michael Carreño Seijas, de 22 años y Jonathan Franklin Rojas Rada, de 23 años.
Sus restos estaban en un automóvil Honda Civic plateado, sin placas, que ardía en un terreno baldío donde antes estaba la Policlínica de la Policía Metropolitana, en la esquina entre la avenida José Ángel Lamas y la calle de Los Bomberos.
Los primeros en llegar al sitio fueron funcionarios del Cuerpo de Bomberos Metropolitanos, quienes fueron llamados por vecinos para que apagaran el incendio del carro. Cuando se percataron de que había cuatro cadáveres notificaron a la policía judicial.
Los cuatro fallecidos participaron el sábado en la tarde en un torneo de softball navideño en la cancha del Ymca San Martín. Eran miembros del equipo La Soledad del Guarataro. Pero también eran conocidos por pertenecer a la banda Los Boxeadores, que opera en esa misma zona.
A las 4:00 pm de ese día, al menos 20 de los asistentes al torneo vieron que los cuatro jugadores y otras dos personas eran detenidos por sujetos que iban en motocicletas del mismo modelo que usan las policías, así como una camioneta.
El domingo en la madrugada, dos de los cautivos fueron liberados respectivamente en Chacao y Tazón, luego de ser golpeados con saña. Mientras iban a una clínica privada, notificaron a los familiares de los otros cuatro compañeros del equipo deportivo.
Los cadáveres quedaron carbonizados. Además, sus captores les cortaron las falanges de los dedos de sus manos y les partieron los dientes para dificultar el proceso de identificación.
Los agentes de la División contra Homicidios pudieron determinar que todos ellos fueron maniatados y que les enrollaron las cabezas con cinta adhesiva.
63 muertes violentas en Caracas:
En ese lapso hubo, en promedio, un caso por hora.
Entre las víctimas de homicidios figura el mensajero Luis Ernesto Palacios, de 30 años de edad. Le quitaron la vida por negarse a entregar una motocicleta de baja cilindrada.
Su madre, Norma Pino, relató que Palacios fue atacado por tres hombres que tenían una especie de alcabala en el barrio Sucre de La Urbina y se había trasladado hasta el lugar para llevar a un compadre a la casa de su novia. Los delincuentes conminaron al mensajero para que entregara el vehículo, pero se negó y su acompañante salió corriendo. Esto le permitió salvar su vida.
Luis Ernesto Palacios recibió cinco disparos que le causaron la muerte. No le robaron la moto, pero sí la billetera, y su cadáver permaneció hasta el día siguiente en las cavas del hospital Domingo Luciani de El Llanito. Para el momento en que mataban a Palacios también ultimaban a tiros a Johendry Antonio Godoy Fernández, de 21 años de edad, en el kilómetro 18 de la carretera PetareSanta Lucía.
Godoy fue sorprendido por ladrones cuando guardaba su motocicleta en un callejón anexo a su residencia. Los homicidas le llegaron por atrás, de manera que él no pudo defenderse.
Su madre, María Fernández, escuchó los dos disparos que le causaron la muerte y al salir vio el cadáver con las heridas en la cabeza.
Por una discusión. El domingo en la mañana Mayrelis Trumero encontró el cadáver de su hermano Freddy José Trumero, de 22 años de edad.
El hombre falleció al recibir cuatro disparos. Le quitaron la billetera, pero su hermana cree que esta muerte no fue para robarlo sino como consecuencia de una disputa que tuvo en una fiesta a la que asistió el sábado en la noche.
La mujer no quiso identificar al hombre que amenazó de muerte a su hermano, cuyos restos fueron encontrados en la parte baja del sector Sabaneta, kilómetro 15 de la vía hacia El Junquito.
Debido a que no portaba documentos, los familiares tuvieron que esperar hasta ayer para retirar el cadáver. Freddy Trumero se mudó a Caracas desde Santa Cruz de Cúpira, con la intención de mejorar su calidad de vida.
Las averiguaciones sobre este caso fueron iniciadas por agentes de la subdelegación Oeste de la policía judicial.
Fuego en Pinto Salinas:
Los cadáveres de dos hombres de mediana edad también fueron encontrados cuando ardían en frente a la casa número 3 del sector Quebrada Lazareto de Pinto Salinas. Los cuerpos de los sujetos fueron levantados por comisiones de la subdelegación Simón Rodríguez de la policía judicial el lunes en la madrugada. Actuaron también funcionarios bomberiles.
Las víctimas no tenían identificación, pero se presume que se trata de indigentes que suelen deambular por el lugar. Aún se desconoce la causa de estas muertes.
Debido a que los cuerpos quedaron carbonizados, los agentes intentarán lograr una identificación positiva mediante pruebas de odontología y radiología forenses. También se entrevistó a personas que residen en el lugar. La semana pasada, dos menesterosos también fueron ultimados en sectores aledaños a la avenida San Martín.
Por: JAVIER IGNACIO MAYORCA
jmayorca@el-nacional.com
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