Luego de ser expropiada por
el socialismo del siglo XXI
La principal compañía de telecomunicaciones en Venezuela, Cantv, no deja de sorprender a los usuarios, no solo por la facilidad con la que intervienen líneas telefónicas o correos electrónicos, tal y como lo denunciamos la semana pasada, sino por las innumerables fallas que constantemente sufren los ciudadanos.
En las taquillas de pago es común leer algún manuscrito con la frase “no hay línea”, a pesar de ser una empresa que cuenta con soporte desde el espacio a través del satélite Simón Bolívar. El servicio de Internet es otra tortura para los internautas quienes padecen constantes cortes de señal, lo que significa retroceso en operaciones de empresas, comercios, entre otros.
Movilnet, compañía nacionalizada que ofrece asistencia en la telefonía celular presentó esta semana fallas en su red 2G, que afectó los servicios de voz, mensajería y datos de los usuarios GSM en Caracas. Pero no todo es negativo, en esta oportunidad Cantv ofrece un nuevo producto para el país, televisión satelital para el pueblo.
A pesar de la selección de canales, los cuales están concebidos para ser gríngolas en donde, como es costumbre, el Estado es quien decide lo que usted tiene que ver, intenta posicionarse como una opción económica para quienes desean tener en casa televisión por suscripción a bajo costo, pero tomando en cuenta la cantidad de fallas de otros productos será complejo presumir el éxito del mismo.
Los problemas de los venezolanos no se solucionan viendo Cubavisión, Irán TV o VTV en HD, lamentablemente todo lo que han expropiado o nacionalizado se convierte en empresas deficientes, pésima calidad. Cantv no escapa de esa sombra negra que ha destruido la producción nacional en todos los sentidos.
La estrategia del Gobierno para los próximos meses es la creación de proyectos populistas especialmente diseñados para los sectores populares con el propósito de impulsar el conformismo, la mediocridad. Muestra de ello es la decisión de decretar no laborable el 2 de diciembre por la realización de la cumbre del CELAC, en un país que necesita es trabajo.
Mientras vemos televisión satelital, continúan vigentes importantes problemas como el desabastecimiento el cual amenaza con entorpecer las festividades navideñas, ya que algunos de los productos que están desaparecidos de los anaqueles como por ejemplo: aceite vegetal y harina de maíz, son esenciales en la preparación de las hallacas, principal plato navideño en Venezuela.
Se pierde de vista la capacidad de asombro ante el país que intenta vender el Gobierno: una nación es crecimiento económico, con poder supuestamente transferido al pueblo y la realidad que día a día enfrentan los venezolanos, durante el año 2012 cualquier cosa inimaginable se puede convertir en realidad y depende de los ciudadanos dejarse llevar por pañitos calientes o castigar tanto deterioro y división.
¡Buen apetito!
Por: ORIAN BRITO PEÑA
orianjesusbrito@gmail.com
Twitter @OrianTV
EL UNIVERSAL
sábado 3 de diciembre de 2011