Durante el primer trimestre de 2011 se
reportaron 124 muertes en los penales
■ Unos 200 trabajadores carcelarios denuncian ser víctimas de maltratos.
■ Tiene 15 años trabajando en las cárceles y conoce todos los penales del país.
■ En la cárcel de Uribana se han registrado siete muertos en menos de una semana.
■ Más de 80 reos han resultado heridos desde que se creo el Ministerio de Prisiones.
■ La titular de Servicios Penitenciarios no ha disminuido la conflictividad en los penales.
■ Iris Varela presuntamente desechó las investigaciones que realizó la Dirección Nacional de Servicios Penitenciarios.
Formaba parte de la extinta Dirección Nacional de Servicios Penitenciarios y ahora es funcionario del Ministerio de Servicios Penitenciarios, que está a cargo de Iris Varela.
Su identidad prefiere resguardarla, pues teme perder su trabajo. Él forma parte de los casi 200 efectivos del nuevo ministerio que, a través de las redes sociales, denuncian maltratos por parte de la conocida “Fosforito”.
“A casi tres meses de la designación de la ministra, existe un ambiente de incertidumbre. Las primeras acciones de ella fueron el desalojo del personal del Consejo Superior Penitenciario, que si bien es cierto ha sido un fracaso, también es cierto que se habían logrado avances”, manifiestan los afectados en su blog http://dnspcombativa.blogspot.es.
Carlos Nieto Palma, coordinador de Una Ventana a la Libertad, asegura que esta página web es de trabajadores penitenciarios serios. “Comparto que hay muchos choros metidos en ese mundo, pero también hay gente buena. El descontento es porque la ministra no lo está haciendo bien. Cuando uno conoce cómo se debe llevar la cárcel y ve las locuras que ella está haciendo, no queda más que protestar”, indica.
Además, se señala en el blog que se desecharon las investigaciones, los manuales de clasificación y agrupación de penados y procesados, y la caracterización de la población penal que tuvieron costo para el Estado porque “fueron realizadas por funcionarios bajo las órdenes de Tareck El Aissami”, añade el texto.
Específicamente, el vocero de identidad resguardada destaca que Varela “desde que llegó no quiere trato con el personal existente, nos trata a todos de corruptos, viciados y tarifados, nos dice que todos iremos pa’ fuera. Las piezas que deja son las más viciadas. Los equipos técnicos que están evaluando son los que siempre han cobrado con los gestores en los penales, pero ahora con la orden de evaluar a todos los internos favorables, así no lo estén porque ella quiere cifras sin medir consecuencias”.
Por otro lado, “en las visitas que ha hecho la ministra a las prisiones se niega a atender al personal. Los deja de manera grosera esperando horas. Sus palabras son: `Yo vengo a atender a los privados de libertad, no a ustedes. No tengo nada que hablar con ustedes’. Y se marcha”, sostiene el trabajador carcelario.
De la carcel modelo a la conflictiva:
Según Nieto Palma y estos funcionarios, más de 40 reos han muerto y casi 80 han resultado heridos desde que inició la gestión de Varela quien, en su cuenta de Twitter, ha resaltado que ha disminuido la conflictividad en las cárceles, pero los blogueros aclaran que no se ha desarmado ningún penal; por el contrario, “cárceles que eran modelo ahora son conflictivas como la Comunidad Penitenciaria de Coro y la Mínima de Carabobo, además de que se han producido secuestros de familiares y funcionarios”.
Los trabajadores del Ministerio de Servicios Penitenciarios señalan que Varela “ha tratado de contrarrestar esto con la promesa de libertades a la población penal, como si ella controlara el Poder Judicial, ha ordenado que se evalúe y se apruebe a todos los internos, así no estén aptos para volver a la sociedad, ya que, según ella, con eso acaba el negocio en las evaluaciones, porque si todos saldrán aprobados, nadie pagará”.
A su vez, explican que cuando estos internos vulneren sus beneficios procesales y regresen a prisión, “la solución se volverá en contra de la ministra porque los reos ya no podrán optar a otro beneficio y deberán cumplir su pena completa, hacinando aún más los recintos penitenciarios”.
Por: PATTY FUENTES GIMÓN