Sudan frío con temor a que
sean juzgados y condenados

Voy a fusilarme desvergonzadamente algunas de las frases del poema El Cuervo, escrito por Edgar Allan Poe en 1831. Ah poeta bueno, caracha. Aquí vamos. Leopoldo López derrotó contundentemente al Gobierno. Lo hizo morder el polvo. Lo humilló.

Lo expuso al desprecio público. Toda Venezuela ganó con su hazaña. Ahora debe tener cuidado de no entender indebidamente su victoria. Para todo hay tiempo. Hay que saber sumar. Only this, and nothing more.

Didalco se arrastró como un reptil. Escogió el camino de la abyección. Se le está pudriendo el alma. Tiene pus en el corazón. Lleno de odios y de mentiras. Lisonjero a por demás. Será parte de las sabandijas y del cuero muerto que larga el sapo. Aborrécelo y tendrás gracia divina. This it is, and nothing more.

Contra Ernesto Paraqueima, candidato a gobernador de Anzoátegui por Podemos, se teje una oscura y repugnante maniobra. Involucra a un importante funcionario del chavismo y a su amante, por cierto, muy ligada a un ex gobernador del mismo estado.

Sin escrúpulos. Lo quieren inhabilitar a base de mentiras, infamias, calumnias, odios y rencillas de viejos ladrones y cabrones. Darkness there, and nothing more.

Henrique Capriles Radonski encabeza cómodamente las encuestas de la oposición.

Mantiene un lenguaje de respeto. No abusa propagandísticamente. Luce amplio con los partidos que lo apoyan. En Miranda alcanza una popularidad que perfora el techo de 70%. Poco a poco va acorralando a Chávez. El Gobierno se la tiene jurada. Merely this and nothing more.

Didalco se buscó otros ex masistas que a semejanza suya sean reos de peculado, dirigentes fracasados, pillos de siete suelas, en Anzoátegui, en Sucre y hasta en Aragua. Un lodazal de desperdicios humanos, el detritus de la política.

Escoria viviente. Nameless here for evermore. Pablo Pérez se ganó su candidatura a base de constancia. De su experiencia.

De su respeto a las normas internas de Un Nuevo Tiempo y de la promesa unitaria. Deberá zanjar políticamente el asunto de la Gobernación de Zulia.

Asunto delicado. Es un buen candidato. Polarizará con Capriles. Perched, and sat, and nothing more.

Ismael se convirtió en el verdugo del chavismo. En la gota que le rebasó el vaso. En ejemplo de dignidad y coraje.

La miseria indeseable hecha carne lo quiere ejecutar. Fiscales oprobiosos y venales andan con hidrofobia detrás de sus quehaceres. Ismael sabrá librarse. Todos somos Ismael.

Todos somos la juez Afiuni. Todos somos Henri Falcón. Todos somos libertad, patria, equilibrio, amor y democracia. Los de la acera de enfrente se secarán como árboles sin agua. It is the wind and nothing more.

El cáncer se apodera de la administración. Lo peorcito va remontando cuestas en la escala del Poder Nacional. Mario Silva es el héroe. Los valores se invierten. Nos diferencian del Gobierno los conceptos simples de vicio y virtud. De premio y castigo. De amor y odio.

De decencia e indecencia.

Tienen la muerte política dibujada en la frente. Sudan frío con temor a que sus tropelías y atropellos sean juzgados y condenados. Están desesperados, como fieras heridas.

No se detendrán en nada para perpetuarse. With such name as nevermore. Henri Falcón representa el retorno de las virtudes. El regreso del infierno. La prueba de que hay futuro. La decencia y humildad. Su popularidad se compara con la de Henrique Capriles. Tiene tabaco en la vejiga y fuego en su verbo. Su acción es un fusil que dispara al corazón de la perdición chavista. Quoth the raven, nevermore.

Por: EDUARDO SEMTEI
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