Víctor Frankl y la Logoterapia
Nunca como ahora estamos prestos a usar todo nuestro bagaje de conocimientos para salir adelante, para calmarnos y para no caer en la desesperanza en estos tiempos de discordias, desencuentros y desarmonías.
Es por esto que es bien interesante conocer la base de la prevención en salud mental muy especialmente discerniendo sobre experiencias como la de Víctor Frankl y otros muchísimos seres que como las flores del camino son maltratadas y sin embargo vuelven a resurgir.
Quiero compartir con ustedes un término muy novedoso que nos muestra la enorme capacidad de las seres humanos para salir de la adversidad cualquiera que ésta sea.
Es así como la palabra RESILIENCIA va a entrar en el lenguaje común para explicarnos conductas que conocemos sin haberles buscado y encontrado explicaciones científicas, tal y como ahora la psicología humana la define.
En días pasados un periodista me hizo una entrevista y me interrogó sobre mi concepto sobre el fracaso y el triunfo y como nosotros los docentes los manejamos en este momento en la educación venezolana.
Inmediatamente traje a mi memoria la palabra resiliencia, término extraído de la física que se ha incorporado a las ciencias que estudian la conducta y la psicología humana, que se define como la capacidad de superar la adversidad y salir fortalecido de ella. “El Ser Humano es responsable de lo que hace, de lo que ama y de lo que sufre” Víctor Frankl.
Esa capacidad la poseen muchísimos niños-as de las clases “menos poseídas”, “los excluidos”, que tienen derecho a descubrir su genialidad y son capaces de salir adelante por encima de los infortunios e incertidumbres de sus vidas. No se trata de la capacidad de sufrir, sino de resistir, de surgir, de renacer.
Resiliencia no significa invulnerabilidad, ni impermeabilidad al estrés, se relaciona mejor con el poder de rebotar y recuperarse. Esa capacidad que tiene el ser humano logra que seamos capaces no sólo de hacer frente a las adversidades de la vida sino inclusive superarlas y ser transformados.
A todos estos yo me pregunto cuales son exactamente las cualidades por las que personas sin esperanza alguna, en casos sin salida relacionadas con enfermedades terminales como el cáncer, el sida, muerte de seres queridos, el desempleo permanente, las pérdidas abruptas de cualquier tipo, historias de hijos de padres alcohólicos o drogadictos, sobrevivan y marchen adelante como muestra de esa capacidad (resiliencia), sin que las circunstancias las hagan tocar fondo o las ahoguen.
La palabra RESILIENCIA tiene su origen del inglés “resilience” que no tiene una traducción exacta en nuestro idioma, pero que significa capacidad de rebote (bouncing back) pararse otra vez como esos muñecos llamados porfiados, cualidad muy particular para resistir.
Un ejemplo de resilencia es el comportamiento de Victor Frankl (1905 –1997). Su vida y su obra estuvieron en el contexto de la Segunda Guerra mundial. El demuestra en una secuencia de hechos encadenados el poder desafiante del espíritu humano.Para Frankl el ser humano es libre, posee la capacidad de elegir, su vida es fascinante y vale la pena conocerla. Escribió un libro titulado “ El sentido de la vida”. El cual está marcado por su experiencia en el campo de concentración nazi en AUSCHWITZ.
El Dr. Viktor Frankl crea un tratamiento psicoterapéutico basado en “el logro”. La traducción que él hace de logros es la de “sentido”, “significado” “propósito”. Lo cual significa que la logoterapia se concentra en la búsqueda del sentido de la existencia humana, en la conciencia individual que responde positivamente al interrogante que le plantea la vida a cada persona.
No es un tratamiento para enfermos, sino un “acompañamiento” para personas que sufren problemas existenciales, como una falta de sentido a sus vidas o a una necesidad de valores específicos: motivos para vivir Valores Vivénciales, que le dan sentido a la vida, aún en circunstancias adversas”.
“El Dr. Frankl demostró que la dimensión espiritual en el hombre es aquella que le hace moverse, levantarse, trabajar con compromiso, luchar por un matrimonio, aspirar a ser la mejor de las madres, padres, romper con las dependencias o terminar una tarea de amor para con el mundo, y así dijó… “llegué a comprender que el primordial hecho antropológico humano es estar siempre dirigido o apuntando hacia algo o alguien distinto de uno mismo: hacia un sentido que cumplir u otro ser.
Frankl no culpa, ni juzga, ni acusa. Su experiencia es una experiencia sobre la fuerza del espíritu humano.
Así que en cualquier situación, no necesariamente en el campo de concentración, es posible experimentar esta fuerza espiritual para dar sentido a la vida, asumir responsabilidades y alcanzar la libertad.
Así amigos-as Resiliencia es otro tema para desarrollar paradigmas.
P.S.- Primeros son los sueños.
Directora de Colegio Calicantina, Maracay, Venezuela
Colaboradora de diario El Siglo y de El Margariteño.
Por: Alicia Steiner
Política | Opinión
@maracayera78