“En la hacienda del General
Juan Vicente Gómez..”
El discurso leído por el señor Presidente el pasado jueves 30 de Junio donde reconoce que fue operado en dos oportunidades debido a un cáncer en la “pelvis”, pero que parece que le da pena decir dónde, finalmente descubre un tanto el panorama que su propio equipo de gobierno mantenía oculto, cuando atacaban a medio mundo tildándoles de canallas mediáticos que creaban falsas informaciones. Ahora, no se dónde van a meter la cabeza en esa fracasada gestión comunicacional que mantienen de una especie de guerra diaria que les lleva al fanatismo.
La verdad es que efectivamente, el gobierno quería ocultar el sol con un dedo creando por supuesto una ola de rumores que seguramente no dejaban dormir al mismo Presidente. Ahora, por el contrario, su sanación debería ser mejor si su estado anímico nada en el mar de la verdad de su situación.
Ahora, resulta que el panorama político se complica precisamente en la lucha por el Poder, porque precisamente, el país no puede seguir en esta incertidumbre de gobierno. Alguien tiene que quedar encargado de la Presidencia de la República para seguir al frente del mando de acuerdo a lo que la Constitución establece.
No es posible que se quiera dirigir al país desde Cuba con un hombre que no está en condiciones para hacerlo y por otra parte, hay que salirle al paso a las alocadas intenciones de un Adán Chávez que pretendía asumir el mando como si estuviéramos en la hacienda del General Juan Vicente Gómez en 1920: Una primera expresión de la locura por el Poder.
Lo cierto, es que la manera en que el Presidente Chávez ha armado su liderazgo opacando a cualquier prospecto en formación deja ver la crisis que se avecina dentro del Psuv: Lo lógico sería que alguien asuma la presidencia de esa organización antes que empiece a despedazarse como un barco a la deriva luchando contra arrecifes en medio de una tempestad.
No me cabe la menor duda que los comunistas deberían apartar el clientelismo rojo y enfrentar una realidad política como partido de gobierno, de lo contrario estaríamos en manos de una crisis política de gran envergadura , que muy bien puede trascender a un período negro, propicio para el desmadre y la mayor corrupción imaginable como si se desataran los demonios y se presentara el fin del mundo.
Igualmente, el cambio tan violento de escenario incide en la oposición, quien también debe asumir con mayor seriedad sus estrategias de forzar la constitución de un equipo multidisciplinario que trabaje con prontitud en un plan de gobierno y en la elección adelantada de un candidato único que se vaya preparando en acometer una campaña con decisión.
De las filas de Psuv también debería salir la opción de un candidato necesario que sustituya al presidente Chávez, que efectivamente no está en capacidad de enfrentar el reto en los actuales momentos y que pasa también por definir la nueva realidad. No cabe duda que no
estamos para estamos para propiciar EL GUABINEO Y LA REALIDAD POLíTICA DEMUESTRA UN MAR ENCRESPEDO.
Por: Luis ALFREDO RAPOZO
luisrapozo@yahoo.es
@luisrapozo