“Majunche, Frijolito y Currutaco…”

En la medida que avanza la definición de precandidatos para lo que será la contienda electoral presidencial, el gobierno con toda su parafernalia e infraestructura de medios, se presta a cargar fuegos contra cualquier posible contendor, para echarle toda el agua sucia que pueda e incluso, inventar campañas ingeniosas –quizás con apoyo cubano- , cuestión de demoler ante la opinión pública la imagen del posible próximo Presidente de la República.

En palabras del propio presidente Chávez comienza el proceso de burla y guasa, llamando “ratas” a la oposición. Nada mas con ese comienzo intransigente se comienza a ver claramente lo que será una guerra vulgar de descalificativos, que sin lugar a dudas le restan nivel a la discusión de los grandes problemas que el país requiere con criterio de seriedad: Entonces, todo indica que la jerga de Chávez, seguirá preñada del vocabulario que se usa dentro de una letrina, escapada de un cuartel descrito en una novela de la época de Gómez.

La señora madre del presidente, “misia Elena”, también aportó su grano de arena con la palabra “majunche” para definir un posible candidato, que enfrentará a su “maraco” y que por supuesto, no les merece el menor respeto.

Pero, toda la vulgaridad que pueda sacar a “flor de piel” el excelentísimo presidente de todos los venezolanos, no afecta en estos momentos a nadie, porque sencillamente, ya tiene acostumbrada a la población con sus botones, capullitos y muestras de frases y actitudes sacadas del mar de oraciones que tiene la lengua de Cervantes. Yo no estoy pidiendo un Chávez “exquisito”, solo pienso que el hombre es uno de los presidentes más vulgares en la Historia Patria y deberíamos hacerle llegar esa opinión, pidiendo respeto en la campaña.

En lo que respecta al canal ocho, uno no sabe que decir, porque las “joyas” que aparecen como “ancla del canal” son sencillamente repugnantes, en la manera como se expresan del resto de los venezolanos y personalidades que de una u otra forma, tienen la osadía de expresar sus ideas, comentarios o dirigir un proceso reivindicativo o político que vaya dirigida o exija del Estado; del gobierno o del propio presidente una respuesta o un pronunciamiento.

Escuchar y ver a Mario Silva, Alberto Nolia y cualquier “guelefrito” que saca adelante la línea del canal es verdaderamente una cosa de mal gusto: de ese canal, lo que sale es odio y manipulación perenne que denigra de la gente sin que el CNE, la defensoría del Pueblo, ni nadie abra la boca.

Entonces, el próximo candidato de la oposición sabe muy bien que viene guerra sucia, pero también tendrá a su favor un gran caldo de promesas incumplidas, fracasos, ineficiencias de la era de Chávez como ningún otro presidente candidato ha tenido. En el Zulia se mofan del segundo puente sobre el lago como si hubiesen anunciado la llegada del ave Fénix, en todo el país el fracaso de una electricidad normal da tela para cambiar de presidente y las muestras de ineficiencias manifiestas son demasiadas…

Por: Luis ALFREDO RAPOZO
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