Patricia Malavé conducía el plateado, el cual
quedó en dos lo frenó un árbol

El accidente entre dos carros modelo Aveo que dejó cuatro personas muertas y tres heridos de consideración, todos ellos amigos, son investigadas por los funcionarios de tránsito terrestre que actuaron ayer en el siniestro, ya que presuntamente se produjo cuando ambos vehículos “regateaban” e impactaron fuertemente.

Los occisos quedaron identificados por sus familiares con los nombres de Gabriel Navarrete Toyo (19), Armando Luis Barrios Ruiz (19), Andrés Eloy Rodríguez Lugo (48) y Patricia Carolina Malavé (25).

Mientras que los lesionados con politraumatismos generalizados y excoriaciones responden a los nombres de Miguel Callejas (18), Jhonatan Berrío (19) y Ramiro Moreno (18).

Los seis hombres y la dama que esta madrugada a las 4:30 estrellaron los dos autos Aveos en que se desplazaban por la avenida Fuerzas Armadas de Maracaibo, habían salido de un “compartir” en la conocida wiskerya, ubicada detrás del centro comercial Costa Verde.

El Aveo, color plata, placas UAG-03Z, era conducido por Patricia Carolina Malavé, estudiante del derecho en LUZ; a su lado se encontraba Andrés Eloy Rodríguez Luengo (47), dueño de una empresa de publicidad y en la parte trasera iba Armando Luis Barrios Ruíz (19), próximo a cursar la carrera de ingeniería eléctrica.

En el otro auto, el Aveo, negro, matrícula AB806FG, viajaban sus compañeros. El auto lo conducía Ramiro Moreno (18), estudiante de ingeniería civil en LUZ; Miguel Callejas (18), estudiante de contabilidad en la misma universidad, Gabriel Navarrete Toyo (17), cursante del quinto año de bachillerato en Cabimas y Jhonatan Berrios (19).

Los ocupantes del auto plateado murieron todos:

Los dos hombres fallecieron en el acto y Patricia a las nueve de la mañana en el HUM. Del auto Aveo negro sólo falleció Navarrete. Moreno, Callejas y Berrios, se encuentran recluíos en el HUM, clínica Paraíso y el hospital Adolfo Pons, respectivamente.

Decenas de familiares y amigos de las víctimas, abarrotaron las adyacencias de la emergencia de los hospitales mencionados y de la morgue forense. Algunos contaron que todos residían en los sectores 14 y 3 de San Jacinto, a excepción de Ramiro Moreno y Gabriel Navarrete. Este último habitaba en la urbanización Las Cuarenta de Cabimas y se encontraba visitando a su madre.

Habían salido de la referida wuskerya y se dirigían a San Jacinto. Las autoridades de tránsito indicaron que a lo cruzaron la prolongación de la C-2 y tomaron la avenida Fuerzas Armadas, comenzaron a acelerar los motores en una especie de “Regateo”. Un amigo de uno de los heridos dijo que en medio de la alegría propia de esas parrandas decidieron echar un “pique” para ver quien llegaba primero a San Jacinto.

Los dos autos al parecer se tropezaron y luego se estrellaron contra varios objetos fijos. Un oficial de la policía municipal de Polimaracaibo, explicó que el Aveo gris se estrelló contra un roble. Efectivos del cuerpo de bomberos de Maracaibo tuvieron que cortar parte de la lata para sacar a los dos hombres que ya habían fallecido y a Patricia Malavé.

Dentro del Aveo negro quedó el cadáver de Gabriel Navarrete. Los otros tres fueron auxiliados por personas que pasaban por el lugar y distribuidos en diferentes centros asistenciales.

Esta mañana se observaron desgarradoras escenas de dolor. Muchos de los familiares llegaron hasta el HUM sin saber la salud de sus seres queridos. En la morgue madres, padres, hermanos y otros familiares y amigos de los fallecidos, se abrazaban buscando consuelo.

Las autoridades de tránsito aseguraron que la ingesta de alcohol y el exceso de velocidad provocaron el accidente.

Fotos: Alfredo Reyes