El reto es comprometer más a
los empleados con la compañía

El informe de Add Solutions sobre perspectivas 2011 revela que las compañías esperan una inflación de 31,15%

Las remuneraciones del sector privado crecieron 27,4%; mientras que las del sector público lo hicieron a un ritmo de 9,9%” se lee en el “Mensaje de fin de año” que emitió el presidente del Banco Central de Venezuela (BCV ), Nelson Merentes, en diciembre. La cifra es contundente: las empresas privadas aumentaron los sueldos de sus trabajadores casi tres veces por encima de lo que le otorgó el Estado a su nómina, durante los tres primeros trimestres de 2010.

El aumento salarial que pudieran recibir este año todos aquellos empleados públicos que ganan más del salario mínimo es desconocido, dado que en el Presupuesto Nacional no se incluye ningún dato.

Las empresas privadas, si bien decidirán los sueldos en función de su rendimiento económico, se espera que otorguen incrementos salariales entre 25 y 33%, según reveló el informe de perspectivas 2011 de la consultora Add Solutions.

A partir de la encuesta de 72 compañías que cubren el espectro bancario, de seguros, de telecomunicaciones, automotriz, manufactura, farmacéutico y consumo masivo en el país, Add Solutions muestra que la perspectiva salarial de 2011 se mantendrá casi igual a la del año pasado. Ahora las empresas apuestan por una tendencia de 28,5%, lo que implica que la diferencia es menos de un punto (0,6%) a la planteada para el año pasado, cuando el promedio fue de 27,9%.

“Seguros y ventas al por menor (retail) son los sectores que proponen aumentos de 25% y que son los menores de toda la gama; mientras que las empresas dedicadas al consumo masivo y las del área farmacéutica son las que ofrecerán mayores incrementos por el orden del 33%, pero, en definitiva hay cierta igualdad en los aumentos propuestos en cada una de las actividades económicas” explica Iván Acosta, director de Add Solutions.

Las empresas privadas, no en vano construyeron sus presupuestos en función de dos variables en las que hay diferencias significativas con la perspectiva gubernamental.

Las compañías esperan, por ejemplo, que la inflación cierre el año cerca de 31,15%. La estimación expuesta en la Ley de Presupuesto Público es una inflación entre 23% y 25%.

La expansión de la economía nacional es el otro factor a considerar. Jorge Giordani, ministro de Finanzas, dejó en claro que el producto interno bruto debería crecer, como mínimo, 2% este año. Sin embargo, la previsión del sector privado tiene un pronóstico más modesto y sólo calcula 0,36% de crecimiento.

Las compañías también coinciden en el doble aumento anual como la estrategia para asegurarse mayor eficacia económica. “En los últimos cinco años, casi todas las empresas han otorgado un incremento en abril y otro cerca de octubre, por eso los empleados ya se han acostumbrado a los dos aumentos, aunque hay sectores más tradicionales como la banca, que aún no aplica esta modalidad”, detalla Néstor Rivero, uno de los investigadores de Add Solutions.

Producción recompensada:

Las empresas privadas, además, se preocupan por un elemento que suele pasar desapercibido: la conservación de su personal más capacitado y productivo. Por ello, las oficinas de Recursos Humanos del conjunto de las compañías encuestadas concuerdan en que mejorar el clima organizacional y aumentar el compromiso de los trabajadores son dos de los retos más importantes en 2011.

Los desafíos, en principio, parecieran abstractos en una economía con control cambiario, alta inflación y poca inversión, pero son justamente esas variables las que impulsan a las empresas a lograr un personal más comprometido. “Si un equipo maneja mi negocio en unas particularidades económicas como éstas, yo tengo que hacer todo lo necesario para que ese individuo esté en las mejores condiciones posibles y además, esté conectado conmigo”, traduce Acosta.

La conexión es difícil de lograr y una de las tácticas que implementarán algunas firmas es el establecimiento de bonos productivos a mediano plazo.

“La retención del talento se está dando con mecanismos agresivos, porque ya no se trata de que se me vaya a la competencia sino que ese gerente se vaya del país. Y lo que se usa son bonos de productividad que se fijan en función de las metas de los próximos 3 o 5 años, porque así se aseguran que esa persona permanecerá en la empresa” apunta el director de Add Solutions.

Otra de las estrategias usadas es por involucrar no sólo al personal de la línea productiva o a la alta gerencia con el aumento de la producción sino también al área administrativa. La participación de estos profesionales se propone como una evaluación más estricta de los gastos y a la vez, se les induce a conseguir descuentos con los proveedores, acciones que les son reconocidas con pagos extras de un porcentaje de su salario mensual.

POR: MARGARET LÓPEZ
mjlopez60@gmail.com
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