¿Puede alguien pensar y tener fe, en que la nueva Asamblea Nacional,
traerá cambios en la conducción política y administrativa del país?
Después de observar los acontecimientos, oratorias y demás parafernalia en la Instalación de la misma, es oportuno decir -que no hay duda alguna-, que nada cambiará y que la polarización acostumbrada en los últimos tiempos se mantendrá; así como la manera autoritaria y discriminadora, de conducir la vida política – por parte de los oficialistas- hacia el resto de los venezolanos, que no comparten las ideas que propone “el chavismo” para cambiar el Estado.
Una verdadera confrontación silenciosa cargada de simbolismos y manipulaciones de valores para tratar de lograr una unificación en el seno de los “gobierneros”, vimos ese día, a través de una televisión censurada y manipulada en extremo, que solo daba cobertura a los diputados oficialistas y los actos promovidos por ellos, en su difusión, con un alto ingrediente de mal uso de los recursos del Estado para su provecho político.
Hicieron un extraño acto en el Panteón Nacional – a todo trapo, aprovechando el poder que tienen para inventar protocolos sectarios, usando ese sitio para ellos exclusivamente, jurando ante los restos del padre de la patria, compromisos revolucionarios, como si ellos son los únicos funcionarios que se juramentarían ese día y que como si los opositores no tienen derecho alguno a presentarse en el Panteón en un acto mas integral.
También se develó un busto de Bolívar, en los patios de la Asamblea, exclusivamente por parte de la bancada del PSUV, como si el padre de la patria es de una sola parte de los venezolanos, utilizando recursos del Estado para provecho de una fracción política con fines parcelarios: Algo deprimente.
Naturalmente, que el ensañamiento contra los diputados Sanchéz y Pilieri al no permitirse su presencia e instalación y además procurar su inhabilitación total deja un sabor amargo en la boca, descubriendo una violación de la Constitución.
No aceptar la participación de la oposición en la conducción de la administración de la Asamblea fue otro elemento importante, que demostró precisamente la mala actitud y la intolerancia que rompe relaciones y que marca la aplanadora bestial que está programada en el característico debilitamiento del gobierno y que crea distancias insalvables entre un socialismo obligado y una población que crece en su rechazo contra el gobierno.
Finalmente, debo plantear el lamentable rol que ejecuta el diputado por Anzoátegui Earle Herrera, quien ha caído en el desempeño de una función de perro rabioso, que personaliza sus intervenciones con insultos y groserías alejadas de la ética parlamentaria.
Creo que el salto de talanquera será un deporte cotidiano en estos cinco años de gestión, donde los oficialistas tendrán que elevar su nivel o caer en una vulgar aplanadora sin discusión.
LUIS ALFREDO RAPOZO
luisrapozo@yahoo.es
@luisrapozo
