“MENSAJE IMAGINARIO…”
Ante un verdadero golpe de Estado a la Constitución venezolana, el general Simón Bolívar, ha creído conveniente dirigirse a los venezolanos, antes de que se lo impida la Ley Resorte, pues como lo expresó en 1828, la suerte de Venezuela no le puede ser indiferente aun después de muerto.
Este fue su mensaje:
“Venezolanos: Alarmado profundamente por lo que se está haciendo en mi nombre, manifiesto como lo hice en 1814, que “No es lo asequible lo que se debe hacer, sino aquello a lo que el derecho nos autoriza”. Y éste prohíbe violar la Constitución y las leyes de manera arbitraria. Como expresé en 1814, amo la libertad y tengo sentimientos nobles y liberales.
No puedo aceptar en silencio, que se use mi nombre para instaurar inconstitucionalmente el socialismo de mi enemigo Carlos Marx.
“Soy liberal por egoísmo” como lo dije sin tapujos en 1823, y si suelo ser severo, es solamente con aquellos que pretenden destruirnos como república independiente que somos desde hace dos siglos.
Como lo dije a R. Wilson, tengo en mas a un soldado de la ley que la respete religiosamente, que al que se cree conquistador del universo. Es una manía miserable el querer mandar a todo trance, irrespetándolo todo. En 1829 afirmé y ahora lo ratifico, que “La destrucción de la moral pública causa bien pronto la disolución del estado”. Para gobernar con justicia hay que respetar las decisiones de la mayoría, pues como dije en Angostura, “La primera de todas las fuerzas es la opinión pública”, no la fuerza de las armas, que nunca es gobierno.
Como lo expresé en Bolivia, el destino del ejercito es proteger la soberanía, ¡Dios nos preserve de que vuelva sus armas contra los ciudadanos de trabajo, como algunos hoy pretenden!. Ayer y hoy como lo expresé a O ”Leary, es insoportable el espíritu militar en el mando civil. Por eso reafirmo con severidad lo que escribí a Páez en 1827:
”Hasta la fuerza misma debería emplearse en contra de individuos que desatienden los intereses de su país, en perjuicio de la confianza que éste les hace”. La dictadura es el escollo de las Repúblicas y la tiranía el compendio de todas las guerras.
Comandante Esteban: No siga utilizando mi nombre para destruir la República. Yo valdría algo si me alabaran y tergiversaran menos. Y le digo estas cosas, pues como expresé a Wilson (1827), ”yo siento por lo presente y por los siglos futuros”. S.Bolívar.
Articulista: Jorge Sánchez Meleán
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