Los lotes incautados son percibidos
como baldíos por los vecinos
No han comenzado los proyectos de construcción de viviendas prometidos en varios garajes del centro
En el antiguo estacionamiento Interbrake 1.091, que también funcionaba como taller mecánico, en la avenida Candilito del centro de Caracas, sólo hay escombros. Los ex empleados debieron ocupar una esquina de la calle, cercana al garaje expropiado hace cuatro meses, para continuar con la reparación de vehículos y observar la transformación de su antiguo puesto de trabajo en un terreno baldío. “Desde que nos expropiaron, nuestros clientes saben que ya no estamos dentro del taller. Nos buscan afuera, donde solemos arreglar los carros.
Ya no se trabaja allí y tampoco construyen viviendas”, dice el mecánico William Parra.
Una inmensa pancarta sobre el antiguo garaje promete que se levantarán 96 viviendas destinadas a damnificados o personas que habitan en zonas de alto riesgo antes de concluir 2012. Sin embargo, los anuncios de edificaciones en estacionamientos del centro de la ciudad no despiertan entusiasmo entre vecinos y algunos damnificados. “Llevamos cuatro meses esperando reubicación en refugio y viviendas.
Apenas han prometido que esta semana nos sacarán del estacionamiento para llevarnos a un refugio digno en Fuerte Tiuna. Después de eso, debemos esperar que pongan el primer ladrillo para construir 83 viviendas en el terreno”, aseguró Pérez Jiménez, como prefirió identificarse un damnificado del garaje El Portal, en Santa Rosalía.
En El Portal habitan cinco familias, custodiadas por la Milicia Bolivariana, desde inicios de año. Los materiales de construcción de las viviendas llegaron ayer al garaje, aunque el Estado había prometido ejecutar las obras con prontitud.
Pese a la percepción de vecinos y damnificados, Francisco Sesto, ministro del Estado para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas, indicó hace 8 días que la construcción de 27.000 viviendas marchaba a buen ritmo. “Al principio no se veía mucho, porque se debe realizar un proceso que tiene que ver con el desarrollo del proyecto…
Hay que diseñar fundaciones, hacer pilotes, hay unos procesos legales que tienen que ver con la expropiación, contratación de empresas. Todo eso se está moviendo”, dijo en declaraciones a la emisora Alba Ciudad.
Dudas sobre el tiempo. La historia de Interbrake 1.091 y El Portal se asemeja a otros estacionamientos expropiados por el Gobierno para edificar viviendas en el centro de la ciudad. Ayer, al menos seis garajes continuaban desguarnecidos.
Para Federico Hernández, empleado del estacionamiento expropiado Inversiones JW Díaz, localizado entre las esquinas de Viento a Pinto en Santa Rosalía, no son notorios los cambios a nivel de estructura: “Han quitado algunos materiales. No han llegado para construir casas. Dijeron que nos llevarían a un refugio, pero eso no ha pasado. Acá esperamos alguna respuesta que nos saque de dudas, pues todo permanece paralizado”.
Él y otras cuatro familias conviven en ese garaje. Aseguran que la Oficina Presidencial de Planes y Proyectos Especiales no tiene recursos para ejecutar las obras. “Ellos nos dijeron que no había presupuesto. No nos visitan frecuentemente”, agregó.
A algunos vecinos de la esquina de Candilito no les sorprende la versión de Hernández.
Aseguran que hace dos semanas llegó un autobús lleno de supuestos damnificados. “Pensamos que iban a invadir, pero no fue así. La gente del Gobierno sólo quería mostrarles dónde construirán sus viviendas.
Sin embargo, ese terreno aún no tiene nada”, contó el dueño de un negocio aledaño al garaje Interbrake 1.091, que prefirió no identificarse.
“No hay atentado ecológico”
Francisco Sesto, ministro de Estado para la Transformación Revolucionaria de la Gran Caracas, señaló que en la construcción de tres edificios en el Paseo Vargas de la avenida Bolívar, en el centro de Caracas, no causarán daños ecológicos. “No hay atentado ecológico”, aseguró ayer a la emisora de radio Alba Ciudad 96.3 FM.
Afirmó que las franjas de, aproximadamente, 60 metros, repletas de árboles, no serán afectadas porque los edificios se levantarán al fondo del terreno y sólo ocuparán 15 metros.
Los edificios, de 240 apartamentos cada uno, se destinarán a damnificados por las lluvias. Sesto reiteró que el proyecto pretende mejorar las condiciones de vida en el sector. “En el Paseo Vargas tenemos la nada. La ciudad está como retirada de allí”.
Por: MAOLIS CASTRO
macastro@el-nacional.com
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